Muere un coronel de la policía en disturbios religiosos en el oeste de Irán

Un coronel de la policía resultó muerto y otras personas pueden también haber fallecido esta semana en Kermanshá, al oeste de Irán, en disturbios que estallaron tras el fallecimiento de un religioso suní, informaron ayer residentes en la ciudad. "El rumor de que un religioso suní fue supuestamente asesinado causó los disturbios que comenzaron el martes", declaró un periodista local.

El coronel Alí Akbar Najáfi murió el pasado miércoles durante los enfrentamientos, aseguró esta fuente, quien dijo que el gobernador de la ciudad había hecho ayer un llamamiento a la calma. La República Islámica de Irán está predominantemente poblada por musulmanes shiíes y existe una amplía minoría suní dispersa por el país.

Los disturbios de Kermanshá, una ciudad de más de 600.000 habitantes situada a 525 kilómetros al oeste de Teherán, se produjeron en los alrededores de la mezquita de Shafei, cuyo jefe religioso murió el pasado lunes. La mezquita está localizada en un barrio donde predomina la minoría suní.

En Pavé, una ciudad kurda que se halla a un centenar de kilómetros al noroeste de Kermanshá y cerca de la frontera con Irak, se produjeron ayer disturbios entre la población suní en respuesta a los rumores de la supuesta muerte de un religioso.