Vuelve la Copa del Mundo sin Tomba y quizá sin Ana Galindo

Las pistas de Park City, en el estado norteramericano de Utah, que serán olímpicas el año 2002 en los Juegos de Invierno de Salt Lake City, acogerán desde hoy la vuelta de la Copa del Mundo de esquí alpino tras su minicomienzo a finales de octubre en la estación austriaca de Solden. Se trata del verdadero inicio ya sin grandes interrupciones hasta los Campeonatos del Mundo de Sestriere (Italia), en el mes de febrero. Hasta el domingo se disputarán cuatro pruebas técnicas, dos gigantes y dos eslalones, masculinos y femeninos, pero las lesiones siguen siendo las grandes protagonistas.Mientras la gran estrella italiana Alberto Tomba continúa sin recuperarse de su caída previa a Solden, la expectación española por ver si Ana Galindo mantiene el espléndido nivel que la llevó a ser cuarta en el primer gigante de la temporada, puede verse frustrada a causa de otro problema físico. La esquiadora que tuvo la mejor actuación desde la retirada de Blanca Fernández Ochoa sufrió una distensión de ligamentos en un tobillo cuando se entrenaba en eslalon en las pistas canadienses de Nakiska, el escenario de los Juegos de Calgary 88. No pudo prepararse durante una semana y hasta el último momento no se sabrá si puede participar en el gigante de hoy, donde la gran favorita volverá a ser la alemana Katia Seizinger, ganadora de la última Copa del Mundo y también de la primera prueba austriaca en la actual temporada.

Las otras españolas presentes serán Ainhoa Ibarra, María José Rienda -la más prometedora, pese a que brillara más Galindo en un día con condiciones muy especiales- y Mónica Bosch.

El gigante masculino será el viernes, y los eslalones femenino y masculino el sábado y el domingo, respectivamente. Tomba, que se lesionó una pierna y un brazo, podría reaparecer el día 1 de diciembre en el eslalon de Brekenridge, pero lo más probable es que se reserve ya para el regreso del circo blanco a Europa a mediados del próximo mes y debute en el eslalon de Madonna di Campiglio, en su país. La Bomba sabe que difícilmente podrá competir ya por una Copa del Mundo y centrará su temporada en intentar repetir sus ha ' zafias ha bituales, como la de este año cuando en febrero ganó el gigante y el eslalon del Mundial de Sierra Nevada. Lograrlo esta vez en su país sería un broche a su ya deslumbrante carrera.