La fiesta donde nadie gana
La fiesta de la bicicleta reunió ayer a más de 300.000 participantes (el mayor número de las, 18 ediciones), según la organización, la COPE. Sólo para lograr salir, a las nueve de la mañana, el gigantesco pelotón necesitó media hora para ponerse en marcha. A las 10.15 llegaba el primer corredor a la meta, situada junto al Retiro, tras saltar la barrera de las motos de la Policía Municipal. Los agentes se enfadaron con el competitivo participante. Sin embargo, su gesto no tiene premio. En la fiesta de la bicicleta nadie gana. Ni siquiera aquellos que piden que la bicicleta sea un medio de transporte en Madrid. Varios integrantes de la asociación Pedalibre gritaron al alcalde: "Bicis 365 días al año". Pero José María Álvarez del Manzano les ignoró y volvió a descartar la bicicleta como medio de transporte. Para los miembros de Pedalibre, Madrid es el hazmerreír de las ciudades europeas, ya que "todas apuestan por la bici y aquí el Ayuntamiento sólo pone trabas".
El Samur atendió a medio centenar de personas, cuatro de ellas con rotura de clavícula.
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