"Hemos demostrado una superioridad fuera de lo normal"

Más allá de los corredores, la Vuelta ha tenido un solo protagonista: Manolo Sáiz. En un mundo como el ciclismo, poco dado a la autocrítica, el técnico cántabro no es una excepción. Siempre está latente la apelación a un enemigo externo como causante de los males propios. Sin embargo, Sáiz, puede regocijarse en el hecho de ser el único director que ha ganado tres Vueltas con tres corredores diferentes: Mauri (91), Jalabert (95) y Zülle (96).

Pregunta. Cuando terminó el Tour usted declaró a Zülle incapaz de ganar el Tour.

Respuesta. No dije eso. Dije que estaba claro que Zülle a lo único que podía aspirar era a ganar un Tour. Es un corredor que necesita que todo le vaya bien y hay que reconocer que en esta Vuelta todo le ha ido muy bien. Y lo que hay que ver ahora es cuál va a ser el salto cualitativo que da hacia el futuro.

P. ¿La ONCE sólo funciona cuando va a tope?

R. Eso es bueno para el ciclismo, ¿no? Es un hecho que corremos de manera agresiva, espectacular y muy competitiva. Y eso sólo se puede hacer estando al 100% de nuestro nivel físico.

P. ¿Les habría valido esta táctica en el Tour?

R. Por supuesto. De hecho hubo un día, el de Madine, en que el Tour podía haber dictado la misma sentencia que Albacete, pero aquel día la ONCE anduvo con miramientos. Y eso no se puede hacer. Se tuvo a gente eliminada y se les dejó volver.

R. ¿No se resienten los corredores de ir a tope?

P. Sólo quiero hacer una reflexión: siempre se nos ha dicho que la ONCE se está resintiendo desde hace ocho años, siempre se dice que no podemos ir así toda la temporada. Pero yo sólo sé, que andan la temporada y a la siguiente y andan siempre. Son los demás los que tiene años buenos y años malos; son los demás los que tienen sólo un mes bueno al año. La ONCE tiene todos los meses buenos y todos los años buenos. Preguntar eso a estas altura...

P. Siempre se quejan de que les critican. ¿Cree que el ONCE no cae simpático?

R. Siempre nos critican; siempre he dicho que somos el quipo del pero. Creo que hay demasiado de la servidumbre en el periodismo español. Demasiado espíritu de endiosar. Se está alabando a corredores que me hace gracia. ¿No será que la filosofía el ciclismo español está equivocada y que la hemos ocultado detrás de Induráin? ¿No será que todos los que nos critican hacen cosas peores que la ONCE? Somos demasiado serviles con los ciclistas. Les dejamos hacer todo lo que quieren para que fichen. La época dura ha pasado y no sé si es bueno o malo. A veces es necesario el látigo.

P. ¿Influye su carácter en las críticas?

R. Por supuesto. Pero mi carácter no es de servidumbre. Defiendo a los profesionales que aportan conocimientos y realidades. Pero cuando veo a un profesional enfrente de mí que a la ONCE la mide con un rasero y que al resto de los equipos les mide por otro, me parece que no es un profesional y le trato como lo que es, como una basura.

P. ¿Se siente ya en el club de los grandes directores?

R. Nunca fue ésa mi motivación. La mayoría de los directores españoles me hicieron mucho daño al principio. Yo siempre les he sabido perdonar. Yo traía un concepto al mundo del ciclismo. Al tren que yo iba a pilotar era muy difícil que ellos se subiesen. Cuando tenía 17 años me llevó Ramón Chamorro Moliner al INEF y me dijo: 'Te vas a subir a un tren que el resto de los directores no puede coger. Y eso lo vas a estar pagando el resto de tu vida'. Y fue una realidad. Lo más importante es haberme ganado el respeto de la gente con la que trabajo. Lo que digan los demás me da igual.