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'Hoy por hoy' cumple 10 años

El matinal de Iñaki Gabilondo celebra su primera década como líder de la radio española

Rosario G. Gómez

Un pequeño ejército de periodistas madrugadores afina los micrófonos para que a las seis de la mañana suene la sintonía de Hoy por hoy, el programa matinal de la cadena SER que esta semana ha cumplido diez años en antena. Iñaki Gabilondo, al frente de la infantería, ha conseguido situarlo en la cima del competido escenario radiofónico, con una media diaria de 2.119.000 oyentes.Hoy por hoy combina la información pura y dura, las tertulias sosegadas y el reporterismo. No faltan la ecología, la ciencia, el humor, las tradiciones perdidas en la memoria o las pintorescas crónicas santorales. Y lo habitan periodistas de aguda mirada, como Luis del Val, irónicos de la tercera edad, como el señor Casamajor, y ciudadanos perplejos. como Joaquín Vidal.

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No siempre el equipo del programa ha sufrido lo que Gabilondo llama "horario de panadero". Hoy por hoy arrancaba a las 9.00 con las noticias aún frescas en los oídos de los oyentes. Con el tiempo, y movido por la fuerza centrífuga de la competencia, ha ido haciéndose más madrugador. La silueta del programa marca tres fases: un primer tramo (de 7.00 a 8.30) con un noticiario clásico; un segundo bloque (de 8.30 a 10.00) destinado a la opinión y la entrevista, y una tercera parte (de 10.00 a 12.20) que sirve de altavoz a las cosas de la vida, con espacio para la cultura, la sociedad y las cosas cotidianas. "Hoy por hoy es como un periódico al que se le incorpora un suplemento a color", dice Gabilondo.

La última comparecencia de Felipe González ante los micrófonos del programa (el jueves pasado) provocó airadas reacciones. Era la primera entrevista que González concedía desde las elecciones del 3 de marzo. Frente a quienes criticaron la elección del ex presidente, Gabilondo recuerda que ha entrevistado más veces a Aznar que a González.

Como la propia radio, el programa ha evolucionado en estos diez años. "La audiencia se ha vuelto más exigente, y parte de los oyentes se han desplazado a la televisión" comenta Gabilondo. "En la radio se han quedado los más cualificados, mientras los ultrapopulares se han enganchado a la televisión". También los oyentes ahora participan más. Por eso Gábilondo iniste en que el tópico de las marujas es un concepto manido superado por la realidad. "Las amas de casa son muy dinámicas", señala. Como consecuencia de "determinadas radicalizaciones" se han producido agrupamientos idelógicos por emisoras en estos diez años. "El público de la SER es templado porque el tono de la cadena lo es", explica Gabilondo. También el público ha ido conquistando las ondas: "El inconveniente de abrir los micrófonos es que se organiza un ejército de habituales que ocupan el espacio. Los políticos están al acecho como si hubieran recibido instrucciones para el asalto". De modo que Hoy por hoy abre los micrófonos sin avisar.El reporterismo es bandera del programa cuando el tema lo mereece. También toma con frecuencia el pulso a la calle, pero sin pretender dar carácter científico a las opiniones. "Sólo son un elemento de color". Los temas que más impacto han causado en el equipo del programa han sido los relacionados con la vida cotidiana, aunque en sus oídos resuenan las voces "terribles del terrorismo". También hay situaciones reconfortantes. Todos los 21 de marzo, con el comienzo de la primavera, un grupo de oyentes sevillanos manda al programa una enorme caja repleta de azahar. Pero la más reconfortante de todas las situaciones es haber sido elegido en las encuestas como el periodista más imparcial. "Es mi máximo honor", concluye.

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