Carlos Sainz gana el prólogo en Australia
Carlos Sainz empezó ayer el Rally de Australia de manera diferente a como está acostumbrado últimamente esta temporada. Sin sobresaltos inesperados, el piloto madrileño logró el mejor tiempo en el corto prólogo de dos kilómetros disputado en Perth, al oeste del país, y se colocó como primer líder de la prueba. Por esta vez, Sainz y el Ford Escort no tuvieron problemas y fueron más rápidos que todos sus rivales, aunque las diferencias resultaron minúsculas. Apenas un segundo separó a todos los favoritos. La verdadera dificultad del rally, no obstante, comienza hoy.
No era el prólogo terreno para establecer diferencias. Una superespecial de 2,2 kilómetros en el centro de Perth sirvió para arrancar la carrera y como espectáculo promocional. Poco más. Sainz marcó un tiempo de 1m 35s y nadie pudo igualar su resultado. Curiosamente, el resto de notables, incluido el finlandés Tommi Makinen, actual líder del Mundial, empató con el mismo tiempo: 1m 36s.Pero la verdadera competición del Rally de Australia, séptima prueba de la temporada, se ha iniciado esta madrugada (hora española) con una etapa de 10 tramos y 182 kilómetros. A Sainz no le será fácil mantener el liderato, pues no parte como favorito. Esa etiqueta se la reparten Makinen y los hombres de Subaru.
El piloto finlandés es, a todos los ojos, el más señalado por los pronósticos. Antes de viajar a Australia se había impuesto en cuatro de las seis carreras disputadas y su ventaja al frente del Mundial (33 puntos sobre Sainz) puede impulsarle hacia el título al término de este rally.
Falta conocer cómo reacciona Makinen a la presión de sentirse casi campeón, y también si su objetivo será sólo sumar puntos, algo que puede bastarle, o si, decide intervenir en la lucha por el triunfo parcial en Australia. También está en juego el título de marcas, por el que pugnan Mitsubishi -el equipo de Makinen- y Subaru, actual poseedora del título.
Sainz, por su parte, empieza hoy su particular viaje hacia el futuro, pues el bicampeón, aunque aún tiene opciones matemáticas este año, persigue ya la puesta a punto de la mecánica y de la gente que le rodea con vistas a la temporada que viene. La mayor fiabilidad del coche y la eliminación de los pequeños fallos y averías son el objetivo de Sainz, aunque pretende estar preparado si se le presenta la ocasión de pelear por la victoria, y hasta por el Mundial.
