Un hombre intenta quemar a su madre en la cama para quedarse con el piso
"0 te vas a las once de esta noche, o te quemo". Ángel Ventosa Pinedo, de 41 años, cumplió su amenaza. El hombre fue detenido la noche del domingo acusado de intentar quemar en la cama a su madre, de 81 años, aquejada de una enfermedad ósea que apenas le permite moverse. Los hechos, motivados por el deseo de Ventosa de quedarse con el piso, ocurrieron a las nueve de la noche en la calle de Pelayo (Centro). Ventosa, según la Policía Municipal, se acercó a su madre mientras descansaba en el lecho, la roció con agua de colonia y prendió fuego. Luego, antes de huir, abrió las espitas de gas. La mujer, rodeada por las llamas, empezó a gritar. Los vecinos, alertados, la rescataron y apagaron el incendio con cubos de agua. La policía detuvo a los pocos minutos a Ventosa en un bar cercano.El intento de asesinato no sorprendió a los vecinos. Ventosa, un electricista en paro con 17 antecedentes policiales, tenía por costumbre maltratar a su madre, con quien vivía en el piso. De hecho, la misma tarde del domingo la había amenazado para que se marchase. "¡A ver si te mueres pronto!", le gritó, según los vecinos. La mujer, asustada, llamó entonces a sus hijas. "Ella quería marcharse, pero no se atrevía, le tenía pánico al hijo", comentó ayer una inquilina del inmueble. Las hijas, ante la petición de ayuda de su madre, acudieron a la vivienda. "Cuando Angelín [Ventosa] se las encontró", contó la citada vecina, Ies amenazó e incluso intentó gplpearlas". Fue entonces cuando Angel Ventosa amenazó a su madre: "0 te vas a las once o te quemo". Luego se marchó.
"Sobre las ocho le vi subir las escaleras, se tambaleaba. Yo estuve atenta para ver si bajaba, pero no le oí. De pronto, la madre empezó a gritar y subimos a rescatarla. Angelín le había prendido fuego a la cama. La sacamos de ahí, y el vecino de arriba apagó el fuego. Entonces nos dimos cuenta de que había dejado el gas abierto. Podríamos haber volado todos por el aire", prosiguió la vecina.
"¿Qué, haciendo fuego?"
Ángel Ventosa, tras prender fuego a su madre, se dirigió a un bar cercano a beber ginebra. Por el camino se encontró a un taxista que reparaba su vehículo. El conductor al ver que Ventosa se encendía un cigarrillo, le dijo en broma: "¿Qué, haciendo fuego?". Ventosa siguió su camino en silencio.La víctima, viuda desde hace diez años, salió ilesa del incendio. Ayer había abandonado el domicilio para irse con una de sus tres hijas. El detenido, una vez trasladado a la comisaría de Centro, solicitó el hábeas corpus (derecho de¡ detenido a ser oído directamente por el juez), que le fue denegado. Ventosa, sobre quien pesaba una orden de captura por falso testimonio, había sido detenido en numerosas ocasiones. En una de ellas cumplió una condena por robo. Separado y con dos hijas, también había intentado suicidarse. "Eso es lo que él decía, pero luego no se cortaba las venas ni se tomaba las pastillas", recordaba la citada vecina.
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