Molina, séptimo en 5.000.
Enrique Molina completó en la madrugada del sábado la participación de los atletas españoles. Séptimo en la final de 5.000 metros, aguantó el tirón de los africanos hasta la última de las 12 vueltas y media a la pista del estadio y nunca se conformó con estar en el grupo de los 12 corredores que formaron el pelotón de cabeza, sino que fue arañando puestos hasta el último aliento, pese a que no tenía posibilidad de alcanzar el podio. Molina compitió en una final dominada por los atletas kenianos, errados nuevamente en su estrategia, porque nunca tiraron con la energía necesaria para desgastar a Niyombago (Burundi), corredor que al proceder de los 1.500 metros tiene mayor velocidad terminal y que lo único que necesitó para ganar fue aprovecharla en los últimos 200 metros.
