Días de observación y desgaste
Movida. Al principio hemos hecho trabajar al Telekom con el ataque de Jiménez. Se veía, que muchos querían atacar, pero que ninguno quería ser el primero. Así que se trataba de echar la chinita. Hemos visto también que el Telekom se ceba bastante en nosotros y se pone rápidamente en marcha si nos movemos. Pero también flojean. En el tercer puerto se vio delante en un corte a Riis y Ullrich, pero a sus compañeros se les vio un poco apretados.Se formó el grupo de ocho escapados y el pelotón se paró, lógicamente. Ahí se fue Uriarte, cuando llevaban dos minutos, a lanzar otra china, pero, organizados como iban los de delante, era imposible. Ya sé que se dice que si hubiera saltado cuando le llevaban menos tiempo habría enlazado, pero no creo. Yo mismo pude haber saltado cuando tenían 20 segundos de ventaja, pero no lo vi claro: tal y como era el puerto me hubieran fundido, seguro que lo único que hubiera hecho es lanzar al Telekom tras ellos. Uriarte, sin querer, se encontró con seis o siete minutos, y en una situación incómoda. Subió un puerto y Jaimerena le dijo que tranquilo: "Déjate ver, que te cojan". Pero ni le veían ni le cogían. Él, luego, nos dijo que no había ido cómodo, algo normal en ese terreno y con el aire de costado, pero tampoco se pegó la gran paliza.
A raíz, de un par de ataques míos se desencadenó una historia curiosa. Tiré una vez y el Telekom, extrañamente, no se cebó conmigo. Probé otra vez y se unieron a mi rueda todos los jefes (Dufaux, Virenque, Olano, Rominger, Riis... ). Miré hacia atrás y vi que se había hecho un corte y que Miguel no estaba. Como estos días va de observador, le había pillado detrás. Pero a las tres curvas ya se metió él en el grupo. No me echó ninguna bronca, simplemente me preguntó que a quién había visto salir rápido a mi rueda. Él, en carrera, es como si fuera con una libreta anotándolo todo. Yo le he comentado quién iba delante y que a por mi saltaron los primeros Dufaux y Virenque. También le comenté que Riis estaba muy atento y salía a muchos cortes.
Ahora, estos días, se trata de seguir intentando desgastar un poquito a los rivales y de mover las cosas para ver sus carencias. Son días de observación y desgaste, porque parece que no, pero con la acumulación de kilómetros que llevamos la gente está cansada.
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