Hospital sin urgencias

Un grupo de personas entra en el ascensor del hospital de Terrassa. Con ellos suben un puñado de, hombres y mujeres vestidos con batas blancas y con identificaciones colgadas del bolsillo. De pronto, a una señora le da una lipotimia y, ante el estupor de los que Viajan en 'el ascensor, los uniformados no reaccionan a pesar de que se reclama su intervención como profesionales de la medicina. "Claro, no pudimos ayudarles porque nosotros no somos médicos", recuerda la joven actriz Alejandra Torray. Esa es una de las anécdotas del equipo de Hospital, la serie dramática que hoy estrena Antena 3 (22.05). No es la única que pueden contar los actores de Hospital. Continuamente se han encontrado con sus colegas del centro clínico de Terrassa y éstos les han espetado: "Vosotros no sois de los nuestros". "¿Tanto se nos nota?", lamentan los actores.Unos y otros, los de verdad y los de pega, han compartido cada día el menú que les sirven en una zona reservada, de la cafetería del hospital. Montse Guallar, que en la serie interpreta a la enfermera Lydia Roca, ni siquiera se quitaba su bata. Xabier Elorriaga (Eduardo Castillo en la ficción) tampoco abandonaba el aire grave de director del hospital. Junto a ellos ejercen, entre otros Mercedes Sampietro, Beatriz Guevara, Joan Carles Gustems y Jaime Pujol. Han reproducido la unidad de cuidados intensivos, cafetería, sala de espera, sala de médicos y de enfermeras, laboratorio y habitaciones. Tomaron la sexta planta del hospital y parte de la tercera.

La serie refleja la vida diaria de un, centro sanitario y las relaciones personales y profesionales que se establecen. La eutanasia, los trasplantes de órganos, las agresiones racistas y el sida son algunos de los temas que abordarán en los diferentes, capítulos de Hospital. "No pretendemos hacer una serie documental", afirma el realizador Joan Guitart, quien se pasó una semana durmiendo en la sala de espera del hospital de Bellvitge: "Lo que vi y oí supera cien veces a la ficción".

Esa experiencia le sirvió para llegar a una conclusión que aplica a los personajes de la serie: "La distancia entre médicos y pacientes es necesaria, porque si se implicaran mucho acabarían locos". Una de las enfermeras del hospital de Terrassa, Montse Pons, ha colaborado como asesora.

Pero si alguna comparación con otras series de médicos pone nerviosos a los responsables de Hospital es que se les recuerde el ritmo frenético de Urgencias. "Nosotros sólo tratamos un caso o, como mucho, un par en cada capítulo", defiende Jaume Santacana, el director artístico.