¿Cuanto medía la rueda trasera de Züle en el prólogo?

¿Cuánto medía la rueda trasera de la bicicleta que usó Alex Zülle en su prólogo victorioso? ¿650 o 700 milímetros? Es una pregunta que condujo ayer a casi tantas respuestas diferentes como veces se formuló entre los propios responsables del equipo ONCE y testigos presenciales de la carrera. No es una curiosidad malsana la que lleva a la duda. Pese a su pequeñez aparente, cinco centímetros es una medida nada despreciable en ciclismo. Y menos aún si se habla del diámetro de una rueda.La cuestión saltó cuando se conoció que Zülle había utilizado un desarrollo de 55/11. Una monstruosidad insólita casi imposible de mover. Algunos sprinters como el italiano Cipollini lo usan, pero como mucho 200 metros. "Lo utilizó más que eso Zülle", dice Manolo Sáiz, su director. Una cifra que asusta. "Eso se puede utilizar en momentos muy determinados y para correr a 70 kilómetros por hora, y en el prólogo no se pudo ir a esa velocidad", disiente Eusebio Unzúe, uno de los directores del equipo Banesto. "Sí, lo utilizó, pero con ruedas pequeñas, y eso es muy diferente". Un mecánico de un equipo rival levanta definitivamente la duda.

Mover fluidamente un 55/11 con ruedas de 700 milímetros supone poseer una fuerza verdaderamente descomunal. Si eso lo hizo Zülle es para echarse a temblar. Con ese desarrollo y ese diámetro, por cada pedalada la bicicleta avanza 10,35 metros. Induráin metió el 54/11 y rueda motriz grande, pero sólo en las rectas más largas y con el viento de espaldas. Con ese desarrollo avanzó 10,20 metros por pedalada, una diferencia notable.

Con la rueda pequeña, sin embargo, la distancia por pedalada se reduce a 9,6 metros, muy similar a la que se logra con un 54/12 y rueda normal, el desarrollo más utilizado, el de Olano, por ejemplo.

"Zülle salió con rueda grande", defiende uno de los técnicos de la ONCE. "Por la mañana salió a calentar con la pequeña, pero luego se decidió utilizar la otra". Otro técnico del equipo, sin embargo, dio otra información. "No, Zülle salió con la rueda de 650 milímetros". Lo cual no sería ilógico: si la bicicleta es más baja, mejora el aerodinamismo del corredor, una de las cortapisas de Zülle. Además, al tener el centro de gravedad más bajo, el artefacto es más estable, es más difícil perder el equilibrio. Su uso tampoco es una novedad. Estas bicicletas las estrenó el Mapei hará tres años, y con ruedas de ese tamaño Olano quedó segundo en el pasado campeonato del Mundial contrarreloj.

Para el veredicto final, la resolución de la duda, no quedó más remedio que acudir al argumento de autoridad, al del propio Manolo Sáiz. "Utilizó rueda delantera de 650 y trasera de 700", zanjó tajantemente el director de la ONCE. Se le concederá, pues, el beneficio de la duda razonable.

El episodio del tamaño de las ruedas fue, sin embargo, secundario frente a los problemas que sufrió la ONCE para que el jurado técnico les permitiera utilizar dos prototipos de bicicleta contrarreloj que incluían unas prolongaciones en el cuadro a la altura de la cadena y del sillín para evitar las turbulencias. "Un comisario belga había leído en una revista que tenía un carenado ilegal, y quería tirárnosla para atrás", cuenta Pablo Antón, mánager de la ONCE, que se pasó la mañana del sábado discutiendo con el Tour.

"Les dijimos que ya la habían utilizado en Valencia y en la Dauphiné, pero ni caso. Al final, el argumento que les convenció es que también las -habíamos usado en el Critérium Internacional, otra carrera organizada por la Sociedad del Tour. Ante eso, ya no pusieron ninguna objeción".

Pero, su gozo en un pozo: el efecto de las palabras mágicas no fue más que transitorio. Los prototipos con antiturbulencias no podrán utilizarlos en la otra contrarreloj llana del Tour. La Unión Ciclista Internacional (UCI) se puso ayer en contacto con los comisarios de la carrera para comunicarles que las novedades en la bicicleta no eran sólo de diseño, sino también técnicas. Por lo tanto, la ONCE debería haberlas sometido a la aprobación de los técnicos de la UCI para poder utilizarlas. Al no haberlo hecho, su utilización queda prohibida con efecto inmediato.

La ONCE, que tiene hasta el 31 de agosto para presentar los prototipos a una petición de homologación que en todo caso no les permitiría su utilización hasta enero de 1997, se arriesga ahora a una multa de 10.000 francos suizos (cerca de un millón de pesetas) por uso indebido de novedades técnicas no homologadas.

Laurent Jalabert y Alex Zülle utilizaron los prototipos finalmente y con éxito, pero ¿qué diámetro tenía su rueda trasera?