El mundo del ciclismo dijo adiós a Mariano Rojas

Cieza, de 30.000 habitantes, vivió ayer una enorme manifestación de duelo con motivo del entierro del ciclista Mariano Rojas, fallecido como consecuencia de las heridas que sufrió el viernes en un accidente de tráfico.El funeral se inició a las 12.00 horas. Durante las horas previas, incluso en las más intempestivas de la madrugada, la capilla ardiente -instalada en el salón de plenos del Ayuntamiento- fue escenario de la presencia permanente de familiares, amigos, vecinos y gente del mundo del deporte. Decenas ole coronas de flores, procedentes de los más diversos lugares, testimoniaban el desgarro causado por la muerte del que estaba considerado como uno de los valores de futuro más firmes del ciclismo español. Si todos coincidían en el dolor, éste se agravaba en la persona de Laurent Jalabert, al que unía una profunda amistad con Mariano Rojas, con el que compartió habitación en multitud de pruebas.

El director del Banesto, José Miguel Echávarri, preocupado por la cita del Tour, también estuvo en el funeral, como prácticamente todo el mundo del ciclismo. El presidente de la Federación Española de Ciclismo, Jaume Serra, comentó el dolor que le produce despedir a un deportista como Rojas. También estuvieron los ciclistas murcianos Jesús Montoya e Ignacio García Camacho, este último paisano de Cieza, y algunos que han abandonado ya la competición, como Perico Delgado.

Las muestras de condolencia fueron interminables. El Consejo Superior de Deportes (CSD) concedió al ciclista la Real Orden al Mérito Deportivo en su categoría de bronce a título póstumo: El alcalde de Cieza, José Antonio Vergara, recibió una llamada de La Moncloa en la que la secretaría de José María Aznar transmitió el pésame del presidente del Gobierno. El presidente de la Comunidad de Murcia, Ramón Luis Valcárcel, especialmente afectado, declaró que se organizará un memorial en recuerdo de Rojas.

En la basílica de la Asunción de Cieza, junto a familiares y autoridades, estaban también, entre otros, Manolo Saiz, director del ONCE y descubridor de Rojas, y el presidente de la ONCE, José Arroyo. En el exterior del templo, que estaba abarrotado, esperaban cientos de personas.

El traslado del féretro al cementerio se convirtió en otra manifestación de duelo popular en la que, según la policía local, participaron unas cuatro mil personas. El mundo del fútbol se sumó al homenaje. El Real Murcia, que ha conseguido el ascenso a Segunda B, decidió retrasar la celebración en señal de duelo.