La leyenda de la Creedence, entre la salsa y el rock mexicano

No están todos los que eran, pero sí algunos. Por eso, la legendaria banda de rock and roll Creedence Clearwater Revival, que actúa esta noche por primera vez en Madrid, ha tenido que sustituir el Revival por Revisited. Ninguno de los hermanos Fogerty, creadores de la mítica banda, estarán en Madrid. Tom, porque falleció, y, John porque al parecer, no quiere saber nada del pasado. Sólo un lustro (1968-1972) duró el cuarteto, que se completaba con el bajista Stu Cook y el batería Doug Clifford, pero dejó tal magnitud de canciones de furia roquera que muchas son las generaciones que han vivido de su recuerdo. La fórmula no era complicada pero resultaba tremendamente agradecida: canciones breves de estribillo corto y pegadizo, letras de insatisfacción y orgullo, rabia eléctrica y actitud honesta. Su pinta de chicos sanos del campo, vaqueros, camperas, barbas y camisas de cuadros incluidas, y la inmediatez de su propuesta contrastaba con la psicodelia de entonces y el inicio del rock sinfónico.

Nunca como ahora ha estado su música tan reivindicada. Aunque no quede de sus tiempos de gloria más que su sección rítmica, resultará grato reencontrarlos.

Los que parecen haberse quedado a vivir en Madrid son los mexicanos Vantroi. Su nombre es el de un viejo mártir de la lucha de los vietnamitas contra el poder yanqui -justo cuando las canciones de los Creedence hacían furor- Vantrol escupen inconformismo a golpe de rock duro.

La cubana Lucrecia, antes cantante del combo femenino Anacaona, actúa dos días para presentar su último disco.

Creedence Clearwater Revisited actúan hoy en La Riviera (Virgen del Puerto, s/n, metro Puerta del Angel). 22.00. 3.800 pesetas. Vantroi, en El Sol (Jardines, 3, metro Sol). 23.30. 900 pesetas. Lucrecia, hoy y mañana, en Galileo Galilei (Galileo, 100, metro Argüelles). 22.15. 1.500 y 2.000 pesetas.