El juego español despierta dudas

España no ha comenzado bien y eso despierta dudas. El empate ante Bulgaria no es un mal resultado en sí mismo. El problema ha sido el juego, poco convincente para quien ha viajado a la Eurocopa con el cartel de favorito. Bulgaria tardó un cuarto de hora en controlar el ímpetu de la selección de Clemente para llevar luego el partido al terreno que le interesaba. Y, luego, en la segunda parte, obtuvo el fruto de un gol de penalti (le habían anulado uno a Stoichkov en posición legal). La reacción española se encontró con la fortuna: un remate inesperado de Alfonso libró a España de la derrota. Sin embargo, este tipo de comienzos no deben conducir a elevar conclusiones a definitivas: de campeones con malos comienzos está repleto el palmarés de los grandes torneos. España vivirá un debate desde hoy hasta el sábado próximo (fecha del encuentro ante Francia). Así es el fútbol en España.Pero, por si acaso, Clemente salió en defensa de lo realizado por España. No hubo en sus palabras espacio para la decepción. Clemente rechazó la justicia del resultado. "Teníamos que haber ganado, porque la iniciativa del juego siempre fue nuestra". El técnico defendió la fortaleza de su equipo y calificó el partido de duro y fatigoso.

La mala noticia de la jornada fue la expulsión del delantero Pizzi, que probablemente será sancionado con dos encuentros. La provocación estuvo de parte de Stoichkov, que consideró que el resultado había sido satisfactorio. "Era imposible que los españoles nos sorprendieran, porque disponíamos de toda la información sobre su juego". En este mismo sentido se manifestó Dimitar Penev, el seleccionador búlgaro. "Lo sabíamos todo de España, así que inicialmente ha sido una sorpresa empatar, pero después, visto lo que ha sucedido en el campo, el resultado no es malo para ninguno".

La jornada se cerró con otros protagonistas. Uno, Alemania. Dura, correosa, tenaz y ambiciosa. De Alemania se dirá que no hace un gran fútbol, pero no falla en la gran competición. Su dominio ante la República Checa fue claro y rotundo: al descanso el marcador ya señalaba el 2-0. Por su parte, Portugal y Dinamarca ofrecieron el mejor partido y un par de buenos goles (1-1). Páginas 51 a 59