MENSAJE CELESTIAL
La Virgen comunicó que el desastre de Chernóbil era una advertencia para la humanidad y para el mundo entero en aparición directa en el santuario de Hrushiv, en la frontera entre Polonia y Ucrania. El mensaje, que incluía la petición de no olvidar a los muertos en la catástrofe nuclear, se lo dirigió a Marina Kyzya, una niña de 11 años, el 26 de abril de 1987, un año después de la explosión, y la coreografía se desarrolló encima del campanario de la iglesia de Hrushiv, y en medio de gran luminosidad, pese a ser las ocho de la mañana. Curiosamente, según ha informado hace unos días Avvenire, el periódico de los obispos italianos, las autoridades entonces comunistas estaban a punto de tirar la iglesia cuando Nuestra Señora hizo valer su poderío. El cardenal Myroslav Lubachivsky, primado de Ucrania, no ha querido pronunciarse sobre la celestial visita, aunque se ha dicho "favorablemente impresionado" por el culto surgido en torno a la Madre de Dios de Chernóbil.-
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