El equipo del Buitre empata en el primer partido de la final mexicana

"Ya que hemos Regado hasta aquí tenemos que intentar ganar; sabemos que el Nexaca es un equipo muy poderoso, pero en el fútbol todo es posible". Así se expresaba ayer Emilio Butragueño después del empate (1-1) conseguido por su equipo, el Celaya, en el primer partido por el título de la Liga de México. El resultado no les resta posiblidades, según el Buitre, de alzarse con el triunfo.

Butragueño recuerda que el año pasado el Celaya ya dio la sorpresa al conseguir el título de la Primera División A (Segunda) en el último encuentro frente al Pachuca, que partía como, gran favorito en los pronósticos.El Nexaca se adelantó en el marcador en el minuto 22, con un gol de cabeza del mexicano Ricardo Peláez. En el 57, tras un remate de cabeza de Butragueño a la madera, Carlos Hernández lograba el tanto del empate ante el alborozo de los 20.000 aficionados que llenaban el estadio Miguel Alemán. A pesar de participar en el gol, Butragueño no realizó, como en otras ocasiones, un buen encuentro, ya que fue sometido a un doble marcaje. El partido decisivo se jugará mañana en el estadio Azteca de la capital mexicana, donde el Celaya deberá obtener algún gol ya que el empate a cero clasificaría al Nexaca.

Respecto a los elogios que la prensa mexicana le ha dedicado a lo largo de toda la temporada, el ex jugador del Real Madrid señala que lo más importante es el equipo. "Prefiero ser el peor jugador el sábado y que el Celaya logre el título". El delentero del Celaya, ciudad del Estado de Guanajuato que vive una euforia deportiva desde.hace varias semanas -el año pasado militaba en Segunda- desea brindar la buena campaña realizada a los españoles que viven en México y a todos los madridistas.

A pesar de la distancia que le separa de Madrid, Butragueño no ha olvidado a su antiguo club. Sobre el futuro entrenador del Madrid, Fabio Capello, señaló: "Ha firmado por tres, años y le deseo que los termine, porque eso sería un buen síntoma. Hay que dejarle trabajar con tranquilidad". Y no cree que su antiguos compañeros tengan problema alguno con el nuevo técnico: "Son profesionales de primerísimo nivel y por ello sabrán adaptarse a nuevos esquemas".