Constructora San José se siente "estafada" en el 'caso Huarte'

El consejero delegado de la Constructora San José, Jacinto Rey, ha manifestado que se siente "estafado y engañado" por la operación que llevó a su empresa a invertir 2.500 millones en Huarte, lo que le convirtió en el accionista mayoritario. Rey ha asegurado que los datos contables de Huarte elaborados por el antiguo equipo directivo, que sirvieron de base para la entrada de la Constructora San José y de la banca acreedora, eran "falsos", lo que convierte la operación en "una estafa clara y nítida".El consejero delegado de la constructora gallega ha destacado, sin embargo, el prestigio de Huarte como empresa. La entrada de la Constructora San José se produjo el pasado mes de febrero y era uno de los puntos claves del plan de viabilidad que se elaboró entonces para superar lo que se creía eran "dificultades transitorias de iliquidez provisional", según relataron más tarde los nuevos accionistas a la Comisión Nacional del Mercado de Valores. El plan contemplaba la aportación por Constructora San José de 2.500 millones y la banca acreedora capitalizaba créditos por 1.662.

La sorpresa se produjo a principios de marzo pasado cuando se descubrió que la situación financiera de Huarte era peor y aparecieron pérdidas por 8.225 millones. El 15 de ese mes Huarte suspendió pagos.

Nuevo plan

El nuevo plan de viabilidad de Huarte ofrece a la constructora gallega la posibilidad de cederle la propiedad de las acciones de la filial El Viso, que explota el Hotel Alcora de Sevilla, y que están valoradas en 2.000 millones de pesetas. Jacinto Rey ha asegurado que esta propuesta, que podría ser una salida para recuperar parte de su inversión, no ha sido negociada por el momento con los directivos de Huarte.Los representantes de San José no acudieron a la junta general de Huarte que se celebró el pasado viernes.

La banca y los obligacionistas se pronunciarán a partir de hoy sobre el nuevo plan de viabilidad presentado por la compañía, que ya ha recibido el apoyo inicial de los proveedores y de los sindicatos. El nuevo presidente, Rafael Fernández, se reunirá hoy con los representantes de los obligacionistas, a quienes la constructora adeuda 7.100 millones de pesetas, que supeditan su apoyo a la entrada con garantías de un socio industrial. El plan prevé la capitalización por parte de los accionistas del 50% de su deuda. La banca también tendrá que dar a conocer su opinión a la constructora. El plan incluye en este caso una capitalización de 7.494 millones sobre una deuda de 29.379. Además los bancos deberían facilitar una línea de descuento para los proveedores por 10.000 millones.