El Betis se empeña en cumplir el partido del 'exilio' en La Rosaleda
Ni el Betis ni el Sporting conocen aún el escenario del encuentro que les enfrentará el 21 de abril, fecha acordada para el partido que el equipo verdiblanco deberá disputar en el exilio por la clausura del Benito Villamarín. La, Federación Española de Fútbol, no obstante, acordó aceptar una propuesta del Betis para que sea el Ramón de Carranza el estadio del destierro. Pero también admitió otra: concedió ala directiva bética un plazo de seis días para organizar el destierro en La Rosaleda de Málaga siempre que se subsanen los problemas de seguridad que impidieron la celebración del Betis-Salamanca en este estadio, el pasado día 17 de marzo.El Betis prefiere Málaga, a pesar del enfrentamiento de sus dirigentes con el gobernador civil de la provincia,, Angel Fernández Lupión, quien prohibió la celebración en La Rosaleda del Betis-Salamanca -con sólo tres días de antelación sobre la fecha prevista- debido a la ausencia de tornos en los accesos al estadio malagueño. El próximo lunes se conocerá el desenlace.
El Betis, por otro lado, se muestra muy reacio a disputar el partido de sanción en el Carranza, dado que sólo tiene capacidad para 24.000 espectadores, mientras que la masa social bética es de unos 39.000 abonados.
