Williams comienza con un doblete

El destino es imprevisible. El canadiense Jacques Villeneuve debutaba en el Mundial de fórmula 1 en el Gran Premio de Australia, primera prueba de la temporada. El sábado logró la pole position y se convirtió en uno de los cuatro únicos pilotos de la historia que lo conseguía en su debut. Y ayer controló la carrera durante 49 vueltas. Su triunfo parecía incuestionable, pero cuando faltaban cinco vueltas para la conclusión de la prueba el motor de su bólido comenzó a sacar humo y tuvo que aminorar la marcha para poder terminar. Fue el turno de su compañero de escudería Damon Hill, que le superó y acabó ganando. Hill se adjudicó de esta forma su 14º victoria e igualó a su padre, Graham Hill, en número de triunfos.Sin embargo, lo que se hizo-patente ya en este primer gran premio de la temporada fue el predominio de los Williams-Renault, por encima de cualquier otra escudería. En la carrera australiana nadie pudo hacer sombra a los dos pilotos de la escudería británica, Hill y Villeneuve. Y en la línea de llegada, la distancia entre el Williams de Hill y el Ferrari del irlandés Eddie Irvine, tercero, fue de más de un segundo, una eternidad en F-1. El austríaco Gerhard Berger (Benetton-Renault) fue cuarto y el finlandés Mika Hakkinen, (McLaren Mercedes), quinto. Michael Schumacher, campeón mundial, tuvo que retirarse en la 32ª vuelta con problemas en su Ferrari.

La carrera tuvo que arrancar dos veces, como consecuencia del espectacular accidente que sufrió el británico Martin Brundle (Jordan-Peugeot) en la tercera curva, del que salió ileso. Y en las dos ocasiones el canadiense Villeneuve se situó en cabeza de la prueba desde la misma salida. El y Hill fueron controlando los ataques de los dos Ferrari y se enzarzaron en una lucha fratricida por el liderato de la carrera. Los dos Williams, parecían inexpugnables y sólo Schumacher se mantenía a una distancia competitiva, pero a costa de forzar a fondo su motor. Benetton, en cambio, no se mostró a la altura esperada.

Villeneuve sufrió su primer percance en su primera entrada en talleres, cuando una de las ruedas no se fijaba correctamente. Regresó al circuito en segunda posición y no recuperó el liderato, ni siquiera cuando Hill repostó. El canadiense tuvo que realizar una bonita maniobra para superar a Hill. El cénit de su pugna llegó cuando, Villeneuve salió de la pista al final de la recta y evitó un accidente con una habilidad propia de los grandes campeones.

El nivel de lucha bajó a partir de entonces porque el británico se conformó con la segunda posición. Pero después el motor de Villeneuve comenzó a perder aceite y tuvo que aminorar la marcha. Hill le superó y se vio así compensado por la mala suerte que le había perseguido toda la temporada pasada.

"Creo que merecía el triunfo", comentó Villeneuve. "Pero si lo pienso fríamente me parece que no está nada mal ser segundo en mi primera carrera en la F-1". Hill, por su parte, se mostró satisfecho. "Comenzar ganando es importante", dijo. La segunda carrera del Mundial se disputará en Brasil el 31, de este mes.