Melchor Mauri sentencia en la contrarreloj
El equipo de la ONCE continúa su racha de triunfos en la temporada. Tras ganar Neil Stephens la Vuelta a Andalucía, y Laurent Jalabert -que ayer empezó la París-Niza- la Vuelta a Valencia, Melchor Mauri se impuso en la decimosexta edición de la Vuelta a Murcia, que ya había ganado en 1994. Mauri se impuso, como se esperaba, en los últimos 15,5 kilómetros contrarreloj individual en un circuito de la capital murciana. Los dos segundos que le llevaba el líder oportunista, Rodolfo Massi, quedaron hechos añicos. El italiano incluso estuvo a punto de no subir al podio y terminó tercero en la general final tras su compatriota Wladimir Belli. El corredor catalán rodó en 18.16 minutos a una velocidad media de 50,812 kilómetros por hora. Miguel Induráin siguió su rodaje suave y buena prueba de ello fue que cedió más de dos minutos sólo en la contrarreloj de ayer.La montaña fue para el murciano Ignacio García Camacho, la regularidad para el australiano Robbie McEwen, las metas volantes para el canadiense Gordon Fraser y por equipos se impuso el ONCE, que colocó a tres de sus corredores -Mauri, Stephens y Zülle- en los primeros puestos de la etapa.
Al igual que hace unos días en la Vuelta a la Comunidad Valenciana, los componentes del ONCE volvieron a arrollar. Primero hicieron la selección eliminando a varios de sus rivales y después controlaron para dejárselo todo en bandeja a Máuri. Zülle le dio ayer la primera referencia al hacer 18.27 minutos y Stephens, en gran forma, siguió con 18.23.
El vencedor de la prueba murciana dejó claro ayer desde las primeras pedaladas que sólo un accidente podía privarle del triunfo. Se acopló perfectamente a su sofisticada bicicleta y a pesar de alguna ráfaga de viento logró mantener un ritmo regular de principio a fin, sin altibajos y dosificando perfectamente las fuerzas en un trazado ideal para mover grandes desarrollos como le gusta a él. Por ello que a mitad del circuito su tiempo era ya el mejor con mucha diferencia con respecto a los pocos corredores que habían salido a disputar a tope la cronometrada, y entre los que no se encontraba el letón Piotr Ugrumov, uno de los pocos que podían hacerle sombra a Mauri. No estuvo en la salida al sufrir una aparatosa caída en el calentamiento.
