Urbanizaciones apocalípticas
Es lamentable que cada vez que la naturaleza se encrespa centenares de habitantes, a 40 kilómetros de Madrid, se vean privados de un servicio tan necesario como es la electricidad. No sé ni me importa el motivo, ya sean cables desprotegidos, aves temerarias, lluvias o viento. Ahora bien, vamos a tener la televisión por cable, podemos entrar en la red Internet, etcétera.No, señores; primero hay que dar un buen servicio a los consumidores que pagan puntualmente el recibo, sin descuento alguno por tener infraestructura deficiente, y que están sufriendo cortes intermitentes de luz que afectan al buen funcionamiento de los ordenadores, televisores, e incluso a la duración de las simples bombillas.-
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