El asesino de Rabin se defiende a sí mismo
Yigal Amir, el asesino del primer ministro israelí Isaac Rabin, se ha quedado sin abogados, y, mientras llega el nombrado de oficio, ejerce su propia defensa. Ayer volvió a dar muestras de la frialdad que ha sorprendido a los israelíes, patente en la actitud que refleja la foto, e interrogó personalmente a uno de los testigos del atentado como si él no fuera el acusado.