El Gijón reacciona tarde ante el Barcelona

El Gijón nadó contra corriente y se quedó a las puertas de una remontada, inimaginable. El Barcelona fue sujeto pasivo en casi todas las claves del partido. El protagonismo se lo reservó su rival, en los aciertos y en los errores. El Gijón defendió ferozmente bajo su tablero, falló como un principiante bajo el del rival, entregó el partido en los primeros cinco minutos del segundo tiempo, resurgió luego de sus cenizas y acabó poniendo al Barcelona de la parálisis total.El equipo azulgrana sólo fue dueño de sí mismo cuando relajó músculos a 15, minutos del final, en plena crisis anotadora de los gijoneses. Luego se enredó a fuerza de despreciar tiros libres y, paradójicamente, fue el acierto de Karnisovas desde la bombilla el que salvó a su equipo de la implacable persecución gijonesa en el marcador. Al final hubo consenso en los análisis: si al partido le hubieran añadido medio minuto, el Barcelona habría mordido el polvo.

La primera parte fue una apoteosis defensiva. Este Barcelona practica la defensa con una efectividad abrumadora, pero no sólo a su eficacia se debieron los escuálidos 17 puntos que anotó el Gijón hasta el descanso.

El colista de la ACB volvió a fallar ataques hasta el sonrojo y cubrió el expediente dejando a todo un campeón de Liga en 37 puntos al descanso. Luego reaccionó tarde.