Triunfo de Shevardnadze en las elecciones presidenciales de Georgia

El actual líder de Georgia, Edvard Shevardnadze, venció ampliamente, como era previsible, en las elecciones presidenciales celebradas ayer en la antigua república soviética. Shevardnadze se habría impuesto con más del 70% de votos, según datos preliminares difundidos anoche por la agencia rusa Itar-Tass. Los georgianos participaron masivamente en los primeros comicios tras la contienda civil que terminó en el derrocamiento de Zviad Gamsajurdia y de la guerra con Abjazia, como resultado de la cual Georgia perdió esa república autónoma.

"Creo que hoy se decide el futuro de Georgia" declaró Shevardnadze a pie de urna. El actual líder georgiano llegó a votar a un distrito de Tbilisi, la capital de la república, en un Mercedes blindado de color negro acompañado de su esposa, Nanuli. El Mercedes es un regalo que le hizo Alemania después de que Shevardnadze escapara a finales de agosto de un atentado contra su vida.Este atentado ha sido aprovechado por las autoridades para aplastar a parte de la oposición, en particular a la organización militar de Dzhava Ioseliani, uno de los caciques que derrocaron a Gamsajurdia y que, ayudaron a instalar en el poder a Shevardnadze. La fiscalía georgiana anunció el sábado por la noche que se ha demostrado que Ioseliani está implicado en el atentado contra Shevardnadze. loseliani, comno diputado, goza de inmunidad.

La fiscalía aseguró además que Dzhumber Patiashvili, el candidato comunista y el único que le podía hacer cierta competencia a Shevardnadze, también está relacionado con el atentado del 29 de agosto.

Además de elegir al presidente, cargo restablecido de acuerdo con la nueva Constitución, los georgianos votaron un nuevo Parlamento. Los partidos favoritos -entre los más de cincuenta que compiten por los 225 escaños del legislativo- son la Unión de Ciudadanos Georgianos -el partido de Shevarddadze-, el Partido Nacional Demócrata -liderado por Irina Sarishvili, viuda de Guiorgui Chanturia, ex presidente de esta organización que fue asesinado el año pasado-, la Unión de Tradicionalistas -encabezado por Akaki Asatiani, jefe del Parlamento en tiempos de Gamsajurdia- y el Partido Republicano, antiguo Frente Popular que lidera el nacionalista Nodar Notadze.

El principal problema político será ahora cómo recuperar la integridad de Georgia, que de hecho ha perdido -como resultado de sendas guerras- Osetia del Sur y Abjazia.