Schumacher iguala a Mansell
El alemán consigue una victoria récord y da el Mundial de marcas a Benetton
Michael Schumacher no para. Tras conseguir el título mundial de pilotos el pasado domingo en Aida, el segundo en su historial, el piloto alemán mantiene el pie en el acelerador para recolectar los premios que quedan en disputa.En el circuito de Suzuka, sede del Gran Premio de Japón, penúltima prueba del campeonato, consiguió igualar el récord de victorias en una temporada que tenía el inglés Nigel Mansell (Williams) en 1992 con nueve triunfos y, además, proporcionó a la escudería británica Benetton su primer título mundial de constructores desde que compite en 1981 (entonces llamada Toleman). Schumacher, que el próximo año correrá con Ferrari, no podía despedirse de mejor manera de su equipo, que ha ganado 26 de los 217 grandes premios en que ha participado (el primero fue en México 86, con Gerhard Berger al volante). Para la última carrera, que se disputará el 12 de noviembre en Australia, le queda un último reto: batir la marca de nueve triunfos en un año.
La victoria del campeón del mundo en Japón fue incontestable. Schumacher cruzó la línea de meta con cerca de 20 segundos de ventaja sobre el finlandés Mika Hakkinen (McLaren Mercedes) -segundo, el mismo puesto que obtuvo en el Gran Premio de ltalia- y casi minuto y medio sobre su compañero de equipo, el británico Johnny Herbert (Benetton Renault) -tercero- El único rival del piloto alemán fue el mismo de los entrenamientos, el francés Jean Alesi (Ferrarri). Pese a ser sancionado con una parada de 10 segundos en boxes por adelantarse en la salida -al igual que su compañero de escudería, el austriaco Berger- y de efectuar un trompo en la curva de entrada a meta, Alesi remontó del puesto 150 al 20 y llegó a situarse a menos de un segundo de Schumacher. Un fallo en el motor de su Ferrari en la vuelta 25, poco antes de cumplirse la mitad de carrera, acabó con su aventura.
La jornada también fue catastrófica para los Williams, cuyo objetivo era mantener por cuarto año consecutivo el título mundial de constructores. El inglés Damon Hill, ganador el año pasado en Suzuka, acumuló una desgracia tras otra después de haber liderado la carrera (de la vuelta 31 a la 34) cuando Schumacher se detuvo por segunda vez para repostar y cambiar los neumáticos. Hill se retiró en la vuelta 40, aunque se aseguró el subcampeonato. Su compañero, el escocés David Coulthard, abandonó en la vuelta anterior. La meteorología cambiante -lluvia a ratos y sol en otros- dejó a los Williams sin opción.
