Los jugadores españoles irrumpen con fuerza en la tabla de goleadores

Los españoles se asoman por fin a la nómina del gol. Nueve jornadas después de iniciada la Liga, los futbolistas nacionales que han visto puerta en más de dos ocasiones son legión. Sin embargo, las alturas de la tabla de goleadores sigue siendo coto vedado para forasteros, Bebeto y Penev, con nueve y seis goles respectivamente, sacan ventaja a sus más inmediatos perseguidores españoles: el incombustible Julio Salinas y Pier, ambos con cinco dianas.Otros españoles, más enrachados la temporada anterior, viven el arranque de esta Liga algo más desorientados. El caso más evidente es Carlos, del Oviedo, que había firmado seis tantos a estas alturas la competición pasada. Ahora tiene sucesor, Oli, encaramado a la lista de realizadores con cuatro goles. Claudio, ahora en el Salamanca, ha sido capaz de vencer la batalla contra su autoestima: ha firmado tres de los siete goles de su equipo. Otro exilado del Deportivo, muy oscurecido en Riazor por la sombra de su hermano menor, Fran, pinta goles en el Compostela a pesar de su posición de centrocampista. José Ramón lleva cuatro.

Y están los de siempre. Aquellos a los que se les presupone goleadores y se les paga por ello. Pizzi, Salinas, Kiko o Pier. El primero no era aún español cuando se cumplían nueve jornadas en la pasada Liga, aunque había alcanzado en el Tenerife exactamente la misma media que ha logrado en esta, cuatro veces ha celebrado un tanto el hispano-argentino.

De la lista faltan ahora Cuéllar, inédito tras la lesión sufrida en el estreno liguero del Barça, y Lardín, más ocupado como asistente esta temporada. Y, por supuesto, se celebra la irrupción de los escolares: Carlos, el sevillista, enmendando la plana al apagadísimo Davor Suker; Iván de la Peña, que marca en casi todas sus apariciones; o Raúl, más entonado en Europa de cara al gol.

El seleccionador español, Javier Clemente, puede estar tranquilo. Hoy tiene más delanteros que nunca para escoger. Precisamente su mayor demanda.