"Felipe tiene que presentarse, Alfonso debe decir lo que píensa"

Francisco Fernández Marugán, 49 años, economista, técnico de administración civil del Estado e inspector financiero, es considerado representante pata negra del sector guerrista del PSOE. Eso sí, templado y con afectos en la mayoría dirigente renovadora ahora conocida como felipista. Es miembro de la Ejecutiva Federal del PSOE desde 1984. Fernández Marugán deja traslucir que, aunque es miembro de la dirección del partido, son otros quienes ahora tienen el poder. En el momento actual considera imprescindibles tres actuaciones: que Felipe González sea el candidato a la presidencia del Gobierno , que Alfonso Guerra diga lo que piensa y que el partido "cuente" en la toma de decisiones.Pregunta. ¿Se sienten los guerristas parte de la dirección del PSOE?

Respuesta. El último congreso federal diseñó un órgano de dirección en el que existen dos maneras de entender las tareas políticas, si bien las posibilidades de una y de otra son diferentes. Nosotros [los guerristas] hemos puesto de relieve los puntos de vista, los diagnósticos que tenemos sobre la actual situación política y las soluciones que para superarla consideramos más convenientes. En mi opinión, cuando las situaciones son difíciles y complejas la calidad de las políticas puede aumentar si se recogen diferentes puntos de vista. La realidad muestra que esto hasta ahora no siempre ha ocurrido.

P. Usted hace muchos actos de partido con los militantes. ¿Qué le dicen y qué le piden?

R. No sólo me preguntan, sino que, como formo parte de la Comisión Ejecutiva Federal, me dicen lo que quieren que desde la misma se haga. Lo dicen con claridad y precisión. Quieren que Felipe se vuelva a presentar como cabeza de cartel en las elecciones generales; quieren conocer la opinión de Alfonso, saber qué piensa sobre lo que está. ocurriendo en la política. Además, quieren que el. partido cuente, que se tome en. consideración la opinión de la. organización sobre múltiples aspectos de la política en Espana.

P. ¿Encuentra usted a los, militantes animados para afrontar una campaña electoral en la que las encuestas les auguran la derrota?

R. Están animados y no creen que vayan a ser perdedores. Han sido protagonistas directos de la dinámica ascendente que España ha experimentado en los últimos 20 años, lo que les da seguridad para defender sus posiciones.

P. Parece que guerristas _y renovadores están de acuerdo en pedir, a Felipe González que sea el candidato.

R. La proporción alcanzada por quienes hemos dicho que se, presente es muy elevada. ¿Por qué? Porque las circunstancias bajo las que se desenvuelve el panorama político español hacen aconsejable su candidatura.

P. Todos los que dicen que Felipe González debe presentarse reconocen en privado que no hay muchas posibilidades de que no lo haga. ¿Tiene el guerrismo candidatos para ese puesto?R. Hay hombres y mujeres en el socialismo español que podrían asumir esa responsabilidad. Los hay en las distintas maneras de entender nuestro partido; por lo tanto, los hay en eso que se ha dado en llamar guerrismo.

. P. ¿Qué es en estos momentos el guerrismo cómo sector y cómo opera dentro del partido?R. Desde el punto de vista de funcionamiento interno diré que es una de las maneras de entender la política dentro del PSOE, que pone el énfasis en el papel que tiene que desempeñar la propia organización. Articulamos cohesión, solidaridad interna con la creatividad política necesaria para dar respuesta eficaz a las transformaciones que se han venido produciendo. Nos oponemos a quienes frívolamente se dedican a denostar la política, a quienes hacemos política o a quienes nos organizamos en partidos.

P. ¿Alfonso Guerra actúa como cabeza de un sector?R. No. Actúa como vicesecretario general del partido desde la lealtad y desde la solidaridad, sin renunciar a sus ideas. De sobra es conocida su capacidad para responsabilizarse y comprometerse. Yo creo que ahora está dispuesto para la tarea que le pida el partido sin descartar ninguna.

P. Usted habrá oído y leído que a su sector se le atribuye la intención de no poner objeción alguna para la designación de candidato a cambio de una representación pactada .de los guerristas en las listas electorales.R. Quien haga ese planteamiento se equivoca. Hay que pensar en los muchos problemas con los que nos vamos a encontrar en el futuro. Creo que hay que hay que restaurar la conviviencia y abandonar la imagen de desconfianza que últimamente nos acompaña. La situación es mucho más compleja, por lo que el asunto de las listas me parece demasiado simple.