Purga de una candidata izquierdista

En el nuevo laborismo británico no hay espacio para veleidades izquierdistas. Ni en las filas dirigentes del partido ni entre los de legados del congreso anual, que ayer demostraron su total sintonía con la dirección. Una abrumadura mayoría de votos, dos tercios de los asistentes, apoyó la decisión del Comité Ejecutivo Laborista de borrar de la lista de candidatos con vistas a las próximas elecciones generales a la radical de izquierdas Liz Davies.Davies, concejal laborista, en el Ayuntamiento de Islington, el mismo barrio de Londres donde reside Tony Blair, ha sido despojada de la posibilidad de optar a un escaño por la jurisdicción de Leeds North East bajo la acusación de formar parte de un pequeño núcleo trostkista en el seno del partido. Su colaboración con la revista de extrema izquierda,Labour Briefing y su resistencia en el pasado a pagar la onerosa poll tax han terminado por arruinar su imagen ante la nueva dirección laborista.

Una llorosa Liz Davies, negó ayer estas imputaciones y acusó a la dirección de haberla arrinconado por razones sectarias. Pero las protestas de los representantes del partido por Leeds North East, que la habían seleccionado como candidata para las próximas elecciones no consiguieron convencer ayer a los asistentes al congreso de Brighton.