"Me gusta mucho Nueva York, pero Madrid es mi ciudad"
De odiosa funcionaria en la película Entre rojas ha pasado a joven madre divorciada cargada de paciencia en Puede ser divertido. La actriz, que ha vivido últimamente en Nueva York, se cita con Madrid gracias al cine: en la antigua cárcel de mujeres de Yeserías, en las cercanías del parque del Retiro y en Madrid está rodando Tesis, primer largometraje de Alejandro Amenábar. Viviendo en Nueva York, Ana Torrent se descubre vecina de Superman, cruza una calle con Michelle Pfeiffer o comparte ascensor con Geena Davis, pero no se olvida de su maestra de interpretación, Cristina Rota, ni del irrepetible rito del tapeo. Es madrileña y tiene 29 años. Debutó con seis en El espíritu de la colmena. Su experiencia como actriz crece de forma inversamente proporcional a la de los directores que la reclaman: "apuesto por los jóvenes". Y gracias a la joven cineasta Azucena Rodríguez ha podido añadir a su rostro grave muecas de comedia.Pregunta. Parece que Madrid ya sólo es para usted un plató de cine.
Respuesta. Qué va. Durante mucho tiempo he vivido en Nueva York y sólo venía a España a trabajar. Ahora vivo de nuevo en Madrid, donde se ruedan mis últimas películas. Encantada me gusta muchísimo Nueva York y viajo allí con mucha frecuencia, pero Madrid sigue siendo mi ciudad.
P. Y, ¿para estudiar arte dramático?
R. El buen funcionamiento de las clases de interpretación es pura cuestión de química. En España sólo he conocido la escuela de Cristina Rota, con cuya forma de trabajar coincido del todo. En Nueva York, sin embargo, tuve que cambiar varias veces de academia.
P. ¿Qué es lo primero que le gusta hacer cuando llega a Madrid?
R. Comer jamón serrano con un buen vino tinto, quedar con los amigos e irme de tapas por ahí. Francamente, viviendo fuera se añora mucho la comida española.
P. Cuenta usted que en la noche neoyorquina se siente más segura que en la madrileña.
R. Lo que sucede es que en Nueva York siempre hay gente por las calles, puedes salir a comprar a cualquier hora, no te sientes sola, no pasas miedo. Pero, como en todas partes, hay que saber dónde no ir a ciertas horas.
P. ¿A qué barrios de Madrid no iría de noche?
R. A muchos. Hay cada vez más zonas de la ciudad que me dan miedo, y creo que Ios jóvenes están cada vez mas asustados. Pero no te hablo sólo de lugares marginales o suburbios, sino de lugares céntricos machacados por los cabezas rapadas, por ejemplo.
P. Ahora se hacen muchas más películas sobre, por y para chicas.
R. Pues no sé, pero me parece muy bien. ¡Ya era hora!
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