Cuatro ciudades esperan en vilo el fin de la guerra del fútbol
El Consejo Superior de Deportes (CSD) anunciará esta tarde su decisión sobre el conflicto suscitado por el descenso a Segunda División B del Sevilla y el Celta por incumplir los requisitos de la Liga de Fútbol Profesional (LFP). Todo parece indicar que el CSI) rechazará los recursos del Sevilla y el Celta, pero encontrará un defecto de forma en la aplicación de la norma por la Liga de Fútbol Profesional. Ello obligará a los presidentes de los clubes profesionales a tomar la última decisión sobre el destino del Sevilla y el Celta. Valladolid y Albacete, que fueron invitados a ocupar las dos plazas vacantes en Primera División, presentaron ayer sus alegaciones y anunciaron que no renunciarán a sus derechos. En manos de la LPF está ampliar a 22 equipos el próximo campeonato, solución que podría dar satisfacción a los cuatro equipos implicados, pero a la que se oponen los principales clubes de Primera División.
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