La Audiencia ordena localizar a cinco rapados por el caso de Susana Ruiz

Ésta es la segunda vez que el tribunal ordena investigar el sorprendente testimonio que el ex rapado dejó grabado en una cinta antes de huir de su casa. Este hombre, cuyas iniciales son J. A. Z., de 22 años, atribuía en la cinta la muerte de Susana a grupos ultras con los que él había tenido relación.Una de las cinco personas a las que el juzgado instructor deberá localizar e interrogar ahora es precisamente J. A. Z., el autor de la grabación. La cinta fue hallada por su madre cuando limpiaba la casa tras la huida de su hijo. La mujer entregó la cinta en una comisaría del extrarradio de Madrid. Sin embargo, la policía no dio crédito a su contenido por entender que el autor era un "fantasioso", y luego atribuyó el dato relativo al diente roto a que tal vez el muchacho lo había oído en alguna emisora. (Hasta ahora, ningún medio informativo ha indicado que hubiera ofrecido ese dato).

En la cinta, J. A. Z. habla también del asesinato del pintor Miguel Ángel Martín, de 24 años, asesinado en abril de 1993. Según el arrepentido, los autores del crimen fueron dos ultras amigos suyos. En la grabación da sus nombres. La policía asegura que ambos jóvenes no tienen nada que ver con la muerte del joyen pintor.Al conocer esa grabación, la Audiencia de Madrid decidió (cuando el caso ya había sido archivado) reabrir las diligencias para efectuar nuevas pesquisas. El tribunal ordenó entonces al Juzgado número 16 que tomase declaración al rapado arrepentido. Sin embargo, varios meses después, la juez instructora, Ana Ferrer (encargada también del caso Luis Roldán), decidió dar carpetazo al asunto al no haber localizado a J. A. Z. Adujo la magistrada que no podía ordenar la búsqueda y captura del joven porque no había cometido ningún delito. Ahora la Audiencia le insta a que siga investigando.

Hermenegildo Pérez Bolaños, abogado de la familia de Susana, se opuso al primer archivo del sumario de Susana por entender que no cabía sobreseerlo sin antes localizar -"como fuese"- al nazi arrepentido. La Audiencia ya le dio la razón una vez y lo ha vuelto, a hacer ahora. En su nueva resolución al respecto, fechada el pasado 24 de julio, ordena a la juez instructora que "oficie" a la policía para que "continúe en la averiguación del paradero" de J. A. Z. El tribunal incluye los nombres completos y direcciones de los cuatro supuestos ultras -Ramón R. G., Fernando F. P., Carlos R. R. y Antonio J. M.- que J. A. Z. cita en su grabación y que deben ser localizados e interrogados cuanto antes.

Pero el tribunal rechaza practicar otra autopsia, contra lo que había solicitado la familia de la chica fallecida. El tribunal explica: "Ante el escrito presentado en esta Audiencia por la acusación particular, hemos de resaltar que la instrucción llevada a cabo por el juzgado instructor ha sido exhaustiva y completa, sin que existan razones para insistir más sobre ella. Sin embargo", agrega, "ante la aparición de nuevos datos derivados del contenido de la cinta de casete grabada por J. A. Z., actualmente en paradero desconocido, y con objeto de agotar si cabe aún más la instrucción y despejar cualquier duda que pudiera existir, este tribunal considera que se ha de tomar declaración a las personas que se citan en la cinta".

El abogado de la familia de Susana Ruiz anunció ayer que interpondrá un recurso de reforma y subsidiario de apelación ante el Tribunal Supremo ante la decisión dell tribunal de rechazar las 16 pesquisas que había solicitado, en especial la de una nueva autopsia.