Valencia y La Coruña preparan su asalto a Madrid para la final de Copa

Dieciséis años después de ganar la última Copa, Valencia vive ansiosa a la espera de la final. Unos 435 autobuses, seis aviones especiales de la compañía Air Nostrum y 12 trenes de Renfe, además de numerosísimos automóviles particulares, parten a Madrid entre hoy y mañana. Mientras, en La Coruña, 30.000 aficionados, en parecidas condiciones, preparan el viaje para presenciar la primera final de su equipo.

La desorganización y la arbitrariedad del Valencia en la venta de entradas para la final de Copa han causado la indignación de abonados y peñistas que, en muchos casos, se han quedado sin localidades. La escasez (le entradas al alcance de los aficionados ha acentuado el interés de éstos por conseguirlas. El choque ha pa.sado a un segundo plano y el guardameta vasco Andoni Zubizarreta, que encara su quinta final de Copa (ha ganado tres), ha reclamado el protagonismo del fútbol: "Hay que hablar de fútbol y dejarse de entradas, autobuses y ampliaciones de capital", manifestó molesto.

Caravana a la capital

Tantos como caben en el estadio de Riazor. En La Coruña, más de 30.000 aficionados preparan su viaje a Madrid, que comenzará esta misma noche, con la salida de dos trenes especiales que transportarán a los integrantes de la peña- radical Riazor Blues. El Ayuntamiento de la ciudad se ha multiplicado para financiar el desplazamiento de un centenar de autocares y las agencias de viaje se han puesto las botas con la organización de ocho vuelos chárter. Otros preparan excursiones por su cuenta. Pese a todo, ayer tarde aún quedaban unas 2.000 entradas por vender, aunque el club prevé finalmente que se agotará el papel.El ambiente en La Coruña recuerda, al final de la Liga pasada, también contra el Valencia, pero en esta ocasión se ha moderado ostensiblemente la euforia.