De mujeres y excomuniones
Las por ahora insalvables diferencias entre católicos y protestantes salieron ayer a relucir en la presentación para España de la Ut unum sint, a cargo de José Sánchez González, secretario general de la Conferencia Episcopal Española, y Julián García Hernando, responsable de la comision de Relaciones Interconfesionales. "El diálogo con los anglicanos", dijo García Hernando, "pese a discrepar sobre el papel de las mujeres en el sacerdocio, no se ha roto. Quienes trabajamos en edificar ese diálogo creíamos tener en la punta de los dedos la unidad con los anglicanos. Y de pronto se ha perdido en las brumas del horizonte, lo mismo que un barco en el mar".El pasado lunes la FEREDE, que agrupa a los evangélicos españoles, hizo público un comunicado que empezaba: "'Para el catolicismo romano, todo movimiento ecuménico supone una integración de todos los cristianos no católicos en Roma" y, según la declaración vigente de la Alianza Evangélica Mundial en 1986, constataba que "Roma no ha modificado ninguno de los dogmas que constituyen las mayores piedras de tropiezo en el camino del acercamiento; por último, tras recordar "el mantenimiento de la excomunión a los grandes reformadores, como Juan Hus o Martín Lutero", veía que todo ello no "es óbice para desarrollar un diálogo".
"Es una opinión muy respetable", comentó ayer Sánchez, "pero la encíclica no ofrece grandes dificultades doctrinales, es un canto de acción de gracias por los pasos dados y una manifestación de esperanza. Yo creo que contribuirá. Lo que pretende es que lo que ahora está en la discusión teológica cale en la entraña del pueblo sencillo"'.
García Hernando anunció para noviembre la visita a España de George Carey, arzobispo anglicano de Canterbury.
