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Ritmo trepidante en la informacion televisiva de la jornada electoral

Manuel Rivas

El mensaje era conservador, el medio estaba revolucionado. La noche electoral que dio la victoria al Partido Popular fue relatada con audacia técnica y ritmo trepidante por las televisiones. Con puestasen escena de ilusión tridimensional, alardes de grafismo informático y un gran despliegue móvil, las cadenas españolas, aunque de forma desigual, ensayaron su particular "vuelco" y "recambio" en la información de las elecciones.

La noche del domingo fue también una noche interactiva, en la que las reacciones de los líderes políticos se ajustaron tácticamente al ritmo y a los titulares televisivos. Esa pugna virtual alcanzó su mejor momento con la sorpresa de la temprana aparición pública del presidente del Gobierno, Felipe González, y la inmediata comparecencia del líder de la oposición, José María Aznar. Felipe, ileso, entre fieles, templaba la derrota. El otro, crecido y en multitud, templaba la victoria. Se hablaban por señas. El duelo final se aplazaba.Fueron más de 16 horas de información en las cadenas nacionales. Los profesionales parecían haberse planteado previamente esta pregunta: ¿podemos hacer la información electoral tan entretenida como una de suspense? En buena parte lo consiguieron. La mejor prueba es que las desconexiones de Antena 3 (Lo que necesitas es amor) y Tele 5 (Noche de Acción: Delta force) fueron absurdos paréntesis que aprovechó TVE-1.

Más que ver ganar a los que ganaron, en la trama que tejió la noche, fue interesante ver el proceso de mutación socialista. Los sondeos a pie de urna, confirmando las encuestas previas, mostraban al partido gubernamental fuera de órbita.

Los primeros avances, reforzado el efectismo por la innovadora tramoya televisiva, alimentaron la expectativa de una noche trascendente. Los mapas electorales, con la uniforme mancha azul del PP y la gaviota sobrevolando todas las ciudades, con la excepción de una rosa mediterránea y otra atlántica, transmitían el típico cosquilleo electrónico que presagia una gran convulsión térmica.

La primera conexión con Ferraz -la sede central del partido socialista-, hecha por la diligente Antena 3, mostraba la desolación de las sillas vacías. Sólo faltaba que alguien apagara la luz. Pero el PSOE encontró su máscara de oxígeno en la comparación con las europeas. Se les oía respirar en la pantalla. Cipriá Ciscar, rizado por los sondeos, parecía el secretario de socorrismo de Alien, tercera entrega.

Antena 3 comenzó trepidante y dominó el primer tramo de la noche. Aquello era una nave espacial. Impactaba la unidad del diseño, desde la cabecera del programa hasta el atril de Olga Viza. Con el efecto 3-D (fondo tridimensional), galopando las palabras sobre sonora banda galáctica, el comandante Campo Vidal telegrafió: "España gira espectacularmente hacia la derecha". TVE-1 también armó los muebles en línea futurista, con la jovial tripulación de Ramón Pellicer y Ana Blanco, pero el programa fue al ralentí en la fase inicial, con Tom Benítez desgranando resultados como si fueran guisantes. La cadena pública, se benefició de la tenacidad, adelantándose después en varias conexiones.

Tele 5 ganó un tanto en el análisis, con la incorporación de comentaristas y un debate final. Canal + puso sobriedad y síntesis. La nave de Antena 3 fue la primera en enfilar hacia la calle de Génova, la imagen plástica de la noche, que no estaba nada futurista sino taurina y de alirón.

[Por lo que se refiere a las audiencias, Televisión Española le sacó seis puntos de ventaja a Antena 3 cuando se dieron a conocer los primeros sondeos, sobre las 20.00. En el horario nocturno de máxima audiencia, la cadena pública logró la atención del 26,9% de los espectadores, frente al 23,1% de Antena 3 y el 17,2% de Tele 5. El Telediario 1 fue el espacio más visto del día, concuatro millones de telespectadores. En cuanto al tiempo dedicado a las elecciones, TVE-1 ofreció siete horas de información, Tele 5 cuatro horas y media, Antena 3 cuatro horas y Canal + 42 minutos. En total, y según datos de Sofres, cada español consumió el pasado domingo una media de información electoral televisada de 48 minutos.

La emisión de Lo que necesitas es amor en plena información electoral le salió rentable a Antena 3: 3.389.000 espectadores -el 28,3% y segundo programa más visto de la jornada-, en tanto la película de Tele 5, Delta force, fue seguida por 2.631.000 espectadores, el 20% y octavo en las preferencias de la audiencia].

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