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Cruyff suspende la sanción a Stoichkov a causa de las bajas que sufre el equipo

Àngels Piñol

El búlgaro Hristo Stoichkov se reincorporó ayer a los entrenamientos del Barcelona 24 horas antes de que cumpliera los 15 días de expulsión que le impuso Johan Cruyff por despreciar a sus compañeros. El jugador, a su regreso de Bulgaria, recibió una notificación del club que le ordenaba reintegrarse a la disciplina de la plantilla. El cuerpo técnico se plantea que el delantero aparezca mañana contra el Tenerife, ante las numerosas bajas. La negociación con Guardiola finalizó ayer: renovó hasta 1999, y su cláusula de rescisión ha sido fijada en 1.200 millones

Carles Rexach, ayudante de Cruyff, dejó entrever ayer que la convocatoria de Stoichkov podría precipitarse debido a las bajas con las que el conjunto azulgrana afrontará el encuentro en el Heliodoro Rodríguez. Guardiola está descartado tras resentirse de su lesión en el so lio de la pierna izquierda, al igual que Nadal, suspendido por acumulación de tarjetas, mientras que Bakero, es duda a causa de un proceso gripal que le ha provocado la pérdida de cuatro kilos de peso en los últimos días. "Hristo tiene posibilidades de jugar, dadas las circunstancias", adelantó Rexach. Stoichkov tenía previsto reintegrarse a la disciplina del club el próximo lunes y quería mantener ayer mismo una reunión con sus compañeros para demostrarles, con documentos, que no había puesto en entredicho su valía. Fue el mismo Bakero quien aplazó la entrevista hasta el próximo lunes, una vez disputado el partido en Tenerife. "Si perdemos, nos despediremos de la Liga. Nos jugamos mucho y sólo tenemos que cen trarnos en ese partido", dijo el capitán azulgrana.

Cumplir el contrato

El delantero se ha empeñado en exhibir ante el resto del plantel una traducción jurada de las declaraciones que publicó el diario de Bulgaria Standart, en las que criticaba a Cruyff y a varios compañeros, para de mostrar que fueron mal interpretadas. En Sofía se entrevistó con el embajador español en su país para que mediara en el conflicto. Antes de viajar hacia España, Stoichkov, en declaraciones a TVE, alabó a la plantilla; además de mostrarse dispuesto a superar sus diferencias con Cruyff. El jugador reiteró que quiere concluir su contrato con el Barça, que expira en junio de 1996.

Sin embargo, la plantilla azulgrana considera el episodio de las declaraciones efectuadas por Stoichkov al Standart -en las que acusaba a Cruyff de nepotismo por alinear a su hijo Jordi y convocar a su yerno Angoy, y en las que cuestionaba la calidad de Eskurza y José Mari -como la gota que hizo rebosar el vaso. Aun en el caso de que el delantero lograra demostrar que no efectuó tales declaraciones, sus compañeros y el club le recriminan otras cosas. Así, recuerdan que en las vísperas del partido de la Liga de Campeones contra el Paris Saint Germain supeditaba su continuidad a la marcha de Cruyff.

Por otro lado, Pep Guardiola alcanzó ayer un acuerdo con Barcelona para ampliar su contrato -que concluía en 1997- hasta 1999. El jugador percibirá 125 millones antes de septiembre a cambio de que el Barça mantenga intacta la cláusula de rescisión de su contrato, cifrada en 1.200 millones. Guardiola ingresará 170 millones por primas y ficha durante las dos próximas temporadas.

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