China toma medidas contra los monjes budistas en el Tibet para aplastar la creciente influencia del Dalai Lama

Las autoridades chinas de la región himalaya de Tíbet han anunciado enérgicas medidas contra los templos y monjes budistas en un. intento de aplastar la cada vez más extendida influencia del Dalai Lama, que vive en el exilio. La prensa local tibetana informaba ayer de las nuevas normas para limitar el número de monjes en los templos, argumentando que superan con mucho en número a los estudiantes de las escuelas superiores, y expulsar a los lamas de los monasterios donde. sean demasiado numerosos.El prochino Diario de Tíbet informaba ayer: "No debemos permitir que persona alguna, especialmente los jóvenes, pueda ser obligada a hacerse monje, ni que los templos y budas vivientes obtengan donaciones del público, ni -que se incite a la rebelión bajo el pretexto de la religión". Los monjes-budistas se han colocado en el punto de mira después de violentas protestas contra el dominio chino y por el expansionismo de los templos.

Ese rotativo publicó un artículo en primera página el pasado día 10, con motivo del 36º aniversario de una abortada rebelión contra China en el que advierte a los tibetanos que deben permanecer vigilantes frente a los seguidores del exiliado Dalai Lama, al que tilda. de ser "un instrumento de las fuerzas hostiles occidentales". El diario acusa al líder religioso, premio Nobel de la Paz, de tratar de occidentalizar y de dividir a China.

Bajo las nuevas normas, los templos tibetanos no podrán ser construidos sin previa autorización de las autoridades, no se permitirá el resurgimiento de la esclavitud feudal y el pueblo no podrá ser obligado a creer en el budismo, dice el periódico. Los cuadros del partido comunista, no podrán desplegar retratos del Dalai Lama, levantar altares budistas en sus casas o enviar a sus hijos a escuelas budistas.

A finales de 1993, había 1.6 templos budistas en Tíbet número superior al de ciudades y pueblos de la región-, con un total de 40.670 monjes y mon. que represe ntan el 1,77% de la población tibetana. China mantiene un importante número soldados en Tíbet desde que Ejército entró en la región en 1959 para aplastar una rebelión y forzó a exiliarse al Dalai Lama a la India con miles de seguidores.