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FIN DE UNA HUIDA

El ex director de la Guardia Civil será interrogado en los calabozos del juzgado

La titular del Juzgado de Instrucci6n número 16 de Madrid, Ana Ferrer, que investiga las presuntas irregularidades que afectan a Luis Roldán, verá en los calabozos de los juzgados de la plaza de Castilla de Madrid al ex director general de la Guardia Civil. La juez Ferrer, por tanto, no verá a Roldán en su propio juzgado, el número 16 de los de Madrid, que está situado en la 5ª planta del edificio judicial. Y no lo hará para evitar alteraciones en los pasillos de los juzgados, en los que todas las mañanas se suelen concentrar cientos de personas para solucionar asuntos relacionados con la justicia.Fuentes jurídicas señalaron ayer que el juzgado no ha intervenido en el proceso que ha desembocado en el traslado a España de Roldán. Las medidas de seguridad se han extremado ante el riesgo de atentados. Se quiere también evitar una aglomeración de periodistas similar a la que se produjo en junio del año pasado cuando Blanca Rodríguez-Porto, esposa del prófugo Luis Roldán, fue interrogada por la juez Ferrer en su propio juzgado. Los miembros de la Guardia Civil encargados de la seguridad del edificio tuvieron que emplearse a fondo para frenar la avalancha de informadores.

En los calabozos de la plaza de Castilla hay una pequeña habitación en la que los jueces del turno de guardia suelen interrogar a los detenidos.

Si, como parece probable, la juez opta por esperar hasta mañana para tomarle declaración, Roldán sería trasladado, entre tanto, a una prisión, posiblemente la de Ávila. Las celdas de los juzgados, según fuentes jurídicas, no reúnen. condiciones para retenerle en ellas durante toda una noche.

Fuentes de los juzgados apuntaron que Roldán. no será interrogado hasta mañana, dado que el Tribunal de Derechos Humanos de Estrasburgo condenó a España en relación con el caso Bultó porque se interrogó a los procesados tras un viaje de 24 horas en furgón celular. El alto tribunal europeo declaró nulo el juicio por entender que los encausados no estaban en condiciones de afrontar el proceso.

En consecuencia, la intervención judicial se limitará a hacer examinar a Roldán por el forense del juzgado 16 y por un psiquiatra forense. Sólo cuando éstos lo consideren conveniente se procederá al interrogatorio, que podría prolongarse varios días.

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