El Parlamento de Berlín exculpa a Bibi Samaranch

La Cámara de Diputados de Berlín ha rechazado, según la agencia de noticias Sid, una información de la revista de Hamburgo Der Spiegel, según la cual Bibi Samaranch, esposa del presidente del Comité Olímpico Intemacional (COI), Juan Antonio Samaranch, admitió de la candidatura de Berlín a los Juegos del año 2000 un regalo de un jarrón que costaba varios miles de marcos. "Se trata de un asunto privado sin importancia, que no tiene. nada que ver con nuestra candidatura a los Juegos Olímpicos", declaró el portavoz parlamentario Dietrich Hinkefuss. "Ni. siquiera con mucha fantasía puede nadie razonable montar un escándalo a costa de esto", añadióLa revelación del semanario ha levantado una gran polvareda en Berlín, cuya candidatura para los Juegos Olímpicos del año 2000 estuvo siempre salpicada de escándalos y se vio recha2ada por varios colectivos ciudadanos. La Cámara de Diputados de Berlín se hizo eco del escándalo, pero exculpé a la mujer de Juan Antonio Samaranch de las acusaciones de Der Spiegel.

Hinkefuss dijo que el jarrón costó sólo 417 marcos (unas 36.000 pesetas), y fue regalado a María Teresa Samaranch., "como una muestra de amistad", por una dama que no reside en Berlín [según un portavoz del COI se trataría de la esposa del miembro alemán del COI, Walter Troeger].

El jarrón de porcelana, que según la información de Der Spiegel fue reclamado por la señora Samaranch a la presidenta de la Cámara de Diputados de Berlín, Hanna-Renate Laurien, estuvo durante varios días retenido en la aduana española y de ahí vino la reclamación de la esposa del presidente.

Hinkefuss fue responsable en la Cámara de Diputados de Berlín de la fallida candidatura a los Juegos Olímpicos del 2000, y entre 1991 y 1992 fue el gestor de la ciudad aspirante durante algunos meses.

Der Spiegel afirmó que Laurien lamentó que el envío. del jarrón a España se demorara durante ocho semanas y que debió disculparse vanas veces por teléfono ante la señora de Samaranch, ya que ésta se sentía "humillada" por el gran retraso del envío. La diputada Laurien ya desmintió la noticia y declaró que nunca habló por teléfono con la esposa de Samaranch.

La candidatura de Berlín 2000 perdió con claridad en la elección de Montecarlo en 1993 -ganada por Sydney- fundamentalmente por la fuerte oposición a la inversión que supondría la organización del acontecimiento. Incluso un grupo de personas protagonizó altercados en la capital monegasca. La ciudad siempre mostró una extraordinaria susceptibilidad a todos los acontecimientos que rodearon la candidatura a los Juegos Olímpicos.