La catedral de Sevilla, probable escenario de la boda de la infanta Elena
Sevilla fue la elegida y ya se prepara para la boda del año. La ciudad recibió con entusiasmo el anuncio de que la infanta Elena y su prometido, Jaime de Marichalar, ambos de 31 años, han elegido esta ciudad para contraer matrimonio el 18 de marzo. Aunque oficialmente no se ha hecho público, parece seguro que será la catedral de Sevilla el lugar elegido para la ceremonia religiosa. El altar mayor del que es el segundo templo más grande de la cristiandad, tras la Basílica de San Pedro, se encuentra en fase de restauración.
Todas las instituciones locales mostraron ayer su agradecimiento y su satisfacción por la elección, realizada nueve días después de anunciado el compromiso de la pareja, y resaltaron los vínculos de la monarquía española con la ciudad. La boda, según el alcalde, Alejandro Rojas Marcos, se hará "sin derroches".
Ante el anuncio de la boda real, el de los preparativos no se hizo esperar. El alcalde de Sevilla, Alejandro Rojas-Marcos, anunció ayer que creará dos comisiones de seguimiento de los preparativos del enlace. El andalucista Rojas Marcos indicó que promoverá una comisión externa, en la que pretende involucrar a todas las instituciones locales y autonómicas, y otra interna municipal de áreas y servicios.
