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Una comandancia, reconvertida en edificio universitario

Los complutenses no volverán a ver los balcones de la fachada de la comandancia, ni los mozos de remplazo a sellar allí sus cartillas. La comandancia, antiguo colegio y convento de los trinitarios descalzos (1625), está en obras para convertirse en uno más de los edificios recuperados por la Universidad de Alcalá y, posiblemente, en sede de centro de estudios internacionales.Este edificio pasó a manos del Ejército tras la desarmotización de Mendizábal, en 1835. Los militares lo conservaron "bastante bien dentro de lo que cabe", según el arquitecto José Luis Quintana, autor del proyecto de rehabilitación. Utilizaron el semisótano abovedado -donde los monjes enterraban a sus muertos- como caballerizas, dividieron en dos la iglesia y usaron el coro como oficinas, y la nave central, como salón de actos.

Los obreros están ahora limpiando el edificio, eliminando los elementos modernos y recuperando los antiguos. Una obra con un presupuesto de 469 millones de pesetas, financiados por la Universidad alcalaína y el Ministerio de Obras Públicas, que devolverá al antiguo colegio de trinitarios su uso universitario a partir de noviembre de 1995. Para el ciudadano de a pie, el cambio más visible será la eliminación de los balcones y la redistribución de las numerosas ventanas de diferentes tamaños que se abren en las fachadas y que volverán a sus reducidas dimensiones originales -eran de un convento-, a ser todas iguales y a estar perfectamente alineadas.

Los universitarios podrán ver también cómo era la iglesia -el muro que la dividía se ha tirado- y algunas pinturas murales al temple que se conservan en ella. Sus futuros usuarios disfrutarán de su jardín romántico, que incluye altas palmeras, y de su hermoso claustro.

La cripta de la planta baja se convertirá en sala de profesores, se habilitará una biblioteca, y en la zona que da al jardín se instalarán las cocinas de un comedor universitario. En la primera planta -a la que se accede desde la vieja puerta de la comandancia sobre la que estaba el rótulo de "Triunfar o morir"- se construirán aulas, en las zonas donde peor se ha conservado la estructura original, y sobre la cafetería, la sede de varios departamentos. En la segunda planta habrá más despachos. La iglesia se convertirá en otra biblioteca y el antiguo coro será la zona para los investigadores.

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