El asesino de Yoyes teme que ETA le mate 0 si critica la violencia

El hombre que en 1986 se acercó a la ex etarra reinsertada Yoyes y la mató al grito de "soy miembro de ETA y vengo a ejecutarte" tiene ahora miedo a ETA. El preso José Antonio López Ruiz, Kubati, condenado a 1.076 años de cárcel, asegura en privado haber dejado de creer en el terrorismo y se muestra partidario de sustituirlo por "la lucha política". Pero la disciplina etarra le atenaza hasta el punto de que no se considera capaz de reconocerlo públicamente.

"Estoy metido dentro de un todo, y dentro de ese todo no me puedo desmarcar, porque desmarcarme sería meterme un tiro a mí, sería irme al agujero". Así lo afirma en unas conversaciones mantenidas con interlocutores no conocidos en la prisión de Burgos.Kubati, inmerso en un mar de dudas; según los diálogos difundidos parcialmente ayer por la cadena SER, muestra abiertamente su temor a sufrir represalias por parte de ETA, así como a perder la influencia que ejerce sobre el colectivo de presos de la organización.

El etarra, uno de los miembros más duros de la organización armada vasca, admite no estar convencido "de lo que pensaba y esas cosas", pero reconoce que está marcado "para toda la puta vida" y que lo único que puede hacer "es intentar desde dentro que esto se solucione".

La viceministra de Interior, Margarita Robles, abierta partidaria de la política de reinserción, asegura que son muchos los presos de ETA "que tienen un discurso hacia dentro y otro distinto hacia afuera". El terror que les inspira ETA hace, en su opinión, que no se atrevan a decir abiertamente lo que ya es normal que digan calladamente en las prisiones".

Gregorio Ordóñez, portavoz del Partido Popular en el País Vasco, mostró ayer su convencimiento de que lo que Kubati tenía que haber hecho era "haberse descabalgado del caballo de la violencia cuando estaba montado en él, y no ahora que está en la cárcel y quiere salir".

Página 12