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Reportaje:

¿De verdad crean opinión?

Cerca de ocho millones de oyentes siguen cada día las tertulias de la radio

Escritores, políticos, periodistas o profesores universitarios. Quienes intervienen asiduamente en las tertulias y debates de la radio y la televisión son capaces de opinar de casi todo, y suscita polémicas y entretenidas discusiones en un gran número de hogares y oficinas españoles. ¿Crean opinión? Por lo menos lo intentan. Una audiencia de siete millones y medio de españoles les sigue cada día.¿Oíste lo que contó ayer Alfonso Ussía en el programa de Luis del Olmo? ¿Sabes lo que ha dicho Ruiz Gallardón en la tertulia de Javier Sardá? Comentarios de este estilo pueden oírse a diario. Los tertulianos tienen un perfil parecido: Personaje famoso que ha publicado varios libros y ejerce una profesión.

Aunque ninguno vive de ello, en general les pagan bien, aunque con grandes diferencias entre unos y otros. Hay quien se embolsa 150.000 pesetas por programa, y hay quien sólo consigue 20.000, pero la media se sitúa en torno a las 50.000 diarias.

Los tertulianos son profesionales conocidos Cuya presencia en la radio o en la televisión contribuye a acrecentar su popularidad. Como ejemplo, muchos repiten en los cursos de verano que organizan distintas universidades. En este caso, por su intervención pueden cobrar entre entre 40.000 y 80.000 pesetas.

Los programas de debate y análisis se conocen, más que por su título, por el nombre propio de su conductor: el de Luis de Olmo (Protagonistas, en Onda Cero) o el de Julia Otero (El gabinete, también en Onda Cero). En la cadena SER hay tres: el de Iñaki Gabilondo (El café de los viernes), el de Javier Sardá (La ventana) y el de María Esperanza Sánchez (A vivir que son dos días). Antonio Herrero (Mesa de trabajo) presenta la tertulia más madrugadora de la COPE y esta misma cadena cuenta también con las tertulias de Encarna Sánchez (La mesa camilla) y de Luis Herrero (La linterna). La presencia de estos conductores es imprescindible para que la tertulia tenga éxito. El humor, la sátira política, la, ironía, la mezcla de personajes con opiniones variadas o la provocacion ponen el resto.

Para Julia Otero, "los que quieren crear opinión son los que creen que saben más que los que les escuchan". Y matiza que su Gabinete "no está en esa onda" y que está convencida de que "la audiencia es lista". Esta popular presentadora calcula que el 50% de los fijos en sus tertulias eran famosos antes de acudir a ellas y que el resto "ha ido cobrando popularidad a través de la radio".

Javier Sardá asegura que en su tertulia "sólo hay abogados y no hay jueces". Cree que la característica más importante de los personajes que intervienen en su tertulia es que son capaces "de cambiar de opinión sobre la marcha, en función de lo que vaya pasando". Este periodista considera, sin embargo, que los invitados no crean opinión, "porquesi no se reflejaría en las decisiones políticas, que tienen poco que ver con las opiniones que la gente da en las tertulias".

Entre los fijos de las tertulias de Onda Cero hay políticos como Pablo Castellano, periodistas como Juan Tomás de Salas o Pedro J. Ramirez, y escritores como Almudena Grandes y Fernando Sánchez Dragó.

En cuanto a las de la radio pública, Radio Nacional de España, destacan los Desayunos de Radio I, la tertulia del programa Edición de tarde, con Antonio San José al frente, La peña y Las cosas como son.

-En los debates de la cadena SER colaboran los periodistas Joaquín Estefanía o Joan Barril, el juez Joaquín Navarro, la escritora Carmen Rico Godoy o los personajes políticos Matilde Fernández y Celia Villalobos. Y en las tertulias de la COPE hay una mayoría de comentaristas: Julián Lago, Federico Jiménez Losantos, Jaime Capmany, Ramón Tamames o Amando de Miguel.

Pero las tertulias que permanecen actualmente en antena tienen poco que ver con las tradicionales, que mantenían los abuelos en los cafés y casinos de los pueblos. Existen distintas modalidades: los políticos o periodistas que expresan su opinión sobre temas de actualidad (Protagonistas, que tiene 1.962.000 oyentes), los escritores, sociólogos o historiadores que hablan de un tema social, y los periodistas que analizan los hechos más relevantes de la semana (El café de los viernes, que escuchan 1.939.000 personas). En El gabinete, de Julia Otero, los invitados, que participan una vez por semana, analizan un único tema que el equipo del programa les comunica por la mañana con la idea de que puedan prepararse un poco su intervención. Es líder de audiencia en su hora, con 680.000 oyentes, según los últimos datos de mayo.

Las tertulias de La ventana, de Javier Sardá (371.000 oyentes), empezaron a emitirse el pasado mes de septiembre y son muy peculiares. Cada día opinan sobre temas diversos entre tres a cinco personas con un denominador común: intelectuales -con Forges, Javier Sádaba y Juan Van Halen-, jóvenes- en la que intervienen una pasota, una afiliada al PP, otro al PSOE, otro a IU y un seminarista, todos gratis- la de los locos (con Leopoldo María Panero y tres personas más, que tampoco cobran) y la de los políticos -Alberto Ruiz Gallardón y José Barrionuevo-.

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