La calidad debe suponerse
Que nadie espere ver grandes partidos en las semifinales masculinas del torneo de Wimbledon. Los cuatro protagonistas que saltarán a la pista son grandes sacadores y algunos de ellos tienen indudable talento. Pero sobre la hierba londinense, la calidad deberá suponerse. Los golpes de fondo, la estrategia, la capacidad de sufrimiento, eso puede disfrutarse en París, pero no en Wimbledon.Pete Sampras, el número uno, se enfrentará a Todd Martin (6º), a quien domina por 3-1 en sus duelos personales. Pero Martin le ganó hace dos semanas sobre la hierba del Queen's. Boris Becker (7º) jugará contra el croata Goran Ivanisevic (4º). Ambos se han enfrentado nueve veces y el alemán lleva seis victorias.El ángel. Sampras tiene 22 años, pero aparenta 18. Su cara de angelito que ni siquiera ha matado una mosca le delata. Es una excelente persona, pero en la pista intenta acribillar a sus rivales. Así murió hace dos días Michael Chang. Sampras lo hace todo bien, se pasea por la pista casi sin pisarla, sirve a más de 200 kilómetros a la hora, se lanza en plancha a la volea y consigue enormes aceleraciones con sus golpes de fondo. Es el número uno del mundo y el gran favorito. Es el único jugador que no ha perdido todavía ningún servicio.El intelectual. Hace tres años, Martin (23º) plantó sus estudios de lingüística en la Universidad Northwestern de Chicago para dedicarse al tenis. Pero ni dentro ni fuera de la pista ha perdido su actitud intelectual. Todo lo analiza, todo lo matiza. Sus progresos han sido espectaculares. Este año explotó en el Open de Australia, donde jugó la final. Y ahora, en Wimbledon, algunos creen que es el único que puede vencer a Sampras.El tramposo. De esta forma calificó el moderado ucranio Andréi Medvedev a Becker tras su enfrentamiento. Se quejó de que había pedido un set -la repetición de un saque por no estar preparado- en un momento crucial para descentrarle. La operación se repitió ante Bergstrom en cuartos de final. Becker había abierto ya la polémica al aprovechar un descanso para ir al lavabo para recibir asistencia de su preparador físico en el partido ante Frana. "Somos profesionales y no estamos jugando un torneo entre amigos", se defiende. Pero la etiqueta queda.El indomable. Ivanisevic será hoy su rival. Es una fiera indomable que basa en el servicio toda la estrategia de su juego. Hace dos años, cuando perdió la final contra Agassi, Goran sirvió 207 aces, 37 de ellos en la final. Ahora, con 118, es quien más ha logrado. Ante Forget conectó un saque a 218,8 kilómetros a la hora, el más veloz del torneo.
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