Los suministradores de Santana llegan a un acuerdo para entregar componentes

La deuda acumulada de los proveedores de Santana Motor asciende a 2.500 millones de pesetas, según ha confirmado Antonio Escudero, presidente de la patronal de suministros de automóviles, Sernauto. Las empresas asociadas a esta entidad han llegado a un principio de acuerdo que permitirá el pago de los componentes que se entreguen en la factoría de Linares para reanudar la producción. Ayer se logró recuperar el ritmo de trabajo previsto por la dirección a una cadencia de 62 automóviles diarios, mientras que los 544 operarios acogidos a prejubilaciones y los 148 que han solicitado baja voluntaria incentivada han comenzado a firmar los finiquitos.Sobre el futuro de la compañía, Luis Carlos Rejón, coordinador de Izquierda Unida en Andalucía, dijo ayer tras reunirse con el comité que la factoría contará probablemente antes de enero de 1995 con un tercer socio, que sería un colaborador de la multinacional Suzuki en Asia.

Antonio Escudero confirmó que, tras una reunión mantenida con los responsables de Suzuki, como multinacional mayoritaria en la sociedad Santana Motor, y los interventores judiciales establecidos por la suspensión de pagos, se ha garantizado el abono de los suministros que se entreguen a partir del acuerdo, comunicado el martes a los integrantes de Sernauto.

Esta actitud contrasta con la primera reacción de la patronal que condicionó al pago por adelantado o con aval bancario la continuidad en la entrega de componentes, llegando a paralizarse la producción por falta de materiales. "Muchos socios se han jugado el ejercicio con la suspensión de pagos de Santana porque se habían pedido créditos para mantener una producción que no se ha pagado", justificó Escudero.

Las entidades vinculadas a Semauto fabrican el 85% de los equipos fundamentales para la fabricación de automóviles, desde neumáticos hasta cristales. Según su presidente, los suministradores sólo pueden confiar en la garantía de pago que establezca la intervención judicial.