Aznar sostiene que nunca aceptará hipotecas para gobernar
El presidente del Partido Popular (PP), José María Aznar, contestó ayer a los nacionalistas en un acto público en Algeciras (Cádiz) y anunció que su partido nunca aceptará hipoteca para gobernar, pues lo que quiere es "la legitimación de las urnas y no la de conversaciones telefónicas con nadie". Respecto a la llamada a la serenidad y la estabilidad hecha por el presidente catalán, Jordi Pujol, Aznar replicó: "La única estabilidad de los socialistas es la de la corrupción y el paro".
El líder del PP acompañó al candidato popular a la presidencia andaluza, Javier Arenas, en la entrega del carné número 400.000 del partido cifra que, según Aznar, sitúa a los populares en la cima de la pirámide en número de afiliados. Ante unas 2.000 personas que a duras penas soportaban el fuerte sol del mediodía, el presidente del PP recalcó que su partido es hoy una "garantía de seguridad y tranquilidad" para España y necesario tanto para el país como para la democracia.Para arropar esta tesis, destacó la unidad y la solidez del PP y su vocación de gobernar en solitario: "El PP piensa en los intereses de todos, con un gobierno independiente y no rehén y cautivo, a las órdenes de cualquiera que es capaz de chantajer como ahora se chantajea. No vamos a participar en maniobras raras", indicó en clara referencia a los nacionalistas catalanes. También contrapuso Aznar el "optimismo, la ilusión y el futuro" que, según él, representa su partido, al desmoronamiento del PSOE.
"Los último años no han sido más que una pesadilla", dijo el líder popular, "y no tiene sentido prolongar la agonía de un gobierno y un partido atrincherado y dispuesto a llevarse por delante lo que sea con tal de mantenerse en el poder".
Sobre la corrupción, Aznar exclamó: "España no merece estar en la manos que está" e insistió en que el Gobierno de Felipe González está instalada en ella.
Durante la entrega del carné 400.000 a una mujer de 63 años, Consuelo Morales, madre de cinco hijos -uno drogadicto y otro parado-, el presidente del PP aprovechó para piropear a las mujeres de su partido y dijo que la nueva militante es el "ejemplo de la gente buena y honrada que trabaja en el partido".
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