Dirigentes socialistas conocían las actividades de De la Torre desde 1990
Varios militantes socialistas comunicaron a la dirección del PSOE, al menos en dos ocasiones mediante informes escritos, las actividades del falso recaudador del partido socialista José Ramón de la Torre Escandón, acusado de estafar a diversas empresas en torno a 5.000 millones de pesetas. Un antiguo socio de De la Torre, ex empleados de la sede central del PSOE ha asegurado a EL PAÍS que explicó personalmente a miembros de la dirección del partido socialista las irregularidades cometidas por De la Torre.
Según el ex socio de De la Torre, en el partido le pidieron pruebas, que no pudo aportar. El PSOE ha negado que la comisión ejecutiva conociera la existencia de los informes y que los dirigentes tuvieran noticia de las actividades de De la Torre antes de que Txiki Benegas las denunciase al Fiscal General del Estado hace un mes.En uno de los informes que en 1990 se hizo llegar a miembros de la ejecutiva del PSOE -del que obra una copia en poder de este periódico- se señala que De la Torre argumentó ante un grupo de militantes socialistas entre finales de 1986 y principios de 1987 que "por mandato de Roberto Dorado y en nombre de Alfonso Guerra" se debía preparar una plataforma de sociedades y empresas que constituyera el embrión de un sistema de financiación del partido.
En aquel tiempo, ninguno de sus socios lo puso en duda. Sin embargo, años más tarde uno de ellos llegó a preguntárselo al mismísimo Alfonso Guerra, quien, según el que lo preguntó, dijo no conocer a De la Torre y que este no había participado en la captación de fondos para el partido.
El fin de este entramado montado por De la Torre, según el informe, "era mediar para conseguir contratos con la Administración, cobrar una comisión y destinar una parte para financiar acciones puntuales del PSOE".
Otra parte de los ingresos conseguidos, según el documento, debía destinarse "para crear un tejido empresarial que sirviera de soporte financiero en un futuro, además de lugar de ubicación de aquéllos que, habiendo actuado lealmente, estuvieran desplazados al final de su cometido".
"No van a probar nada"
Todas las personas consultadas por este periódico en relación con su vinculación empresarial a De la Torre niegan ahora que el entramado constituido por éste se iniciase como un medio de financiación del PSOE, en contra de los datos que figuran en los documentos. El autor de uno de los escritos admitió en privado su autoría a este periódico, aunque inmediatamente agregó: "De todas formas, olvídense del informe porque no van a poder probar nada. Iba sin membrete y no estaba firmado".El informe menciona el reparto de una primera comisión de 50 millones de pesetas, consecuencia de la concesión de diez aparcamientos para residentes en Madrid. "El 50 por ciento era para Ferraz -vía GMP-, 10 por ciento para el PSOE Moncloa que se entrega en mano a J. R. [De la Torre], 10 para ejecutivos de Parmacan y 30 para funcionamiento de Parmacan", según el escrito remitido a dirigentes socialistas.
En otros casos, según el mismo documento, el reparto era de proporciones similares, pero la razón social a la que se desviaba el dinero no era Parmacan, sin Clotime u otra de las del entramado empresarial.
De la Torre utilizaba como baza, para demostrar ante su grupo sus vínculos con la dirección del PSOE, sus reuniones periódicas con Florencio Ornia Álvarez, ex director general en el gabinete de crisis de la Presidencia del Gobierno, y con Pedro Sancho Llerandi, directivo de una filial de Telefónica y ya fallecido.
Almuerzos semanales
Ornia, economista, de 55 años, que obtuvo comisiones del AVE a través de la empresa Atacir, ha confirmado a este periódico sus almuerzos semanales con De la Torre, aunque niega que cualquiera de estos contactos tuvieran algo que ver con la financiación del partido socialista.En el grupo de De la Torre figuraban inicialmente los hermanos Pascual y Félix Llopis Medrano, Joaquín Mundo Aragó y Francisco Javier Martín Plaza. Todos ellos, a excepción de Pascual Llopis, eran militantes del PSOE.
El informe señala que las actividades se iniciaron en la primavera de 1987 con la construcción de aparcamientos para residentes en Madrid. En ese periodo, según el escrito, se incorporaron al grupo Juan Carlos Mangana y Sotero Jiménez, que posteriormente obtuvieron 825 millones de pesetas de la multinacional alemana Siemens en concepto de intermediación y asesoramiento para que ésta se adjudicara contratos del AVE.
Mangana, también economista, y ex empleado de Ferraz, asegura que conoció a De la Torre. en 1987 y tuvo vínculos comerciales con él durante un año. "Por aquel entonces me cuestionaba el abandono definitivo de la política y De la Torre me pareció una persona fiable para emprender negocios", dice.
"Después, cuando le conocí más profundamente, me arrepentí de aquella decisión. Cuando supe que iba diciendo que recaudaba para el partido, algo evidentemente falso, corté toda relación con él", añade.
El escrito remitido a la ejecutiva socialista atribuye, sin embargo, a Mangana la iniciativa, en el reforzamiento de los vínculos del grupo.
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