Roca y Alavedra pugnan por ser candidatos de CiU a la alcaldía de Barcelona
La decisión de Miquel Roca de pugnar por la designación como candidato de CiU a la alcaldía de Barcelona en las elecciones de 1995 ha abierto una verdadera batalla entre bastidores en la coalición nacionalista. La candidatura de Roca choca con las pretensiones del consejero de Economía de la Generalitat, Macià Alavedra, que también aspira a competir por el cargo que desde 1982 ostenta Pasqual Maragall. Mientras, Jordi Pujol, líder de la coalición, mantiene una aparente neutralidad, aunque son de sobra conocidas sus preferencias por el consejero de Economía.Roca parece decidido a trasladar, aunque sea parcialmente, su actividad política a Cataluña, una vez se ha convencido de que no hay perspectivas cercanas de Gobierno de coalición con los socialistas y que, por tanto, su futuro político se reduce a seguir como diputado en el Congreso. El secretario general de CDC rechazó en 1990 una oferta de Pujol para competir con Maragall por temor a ser derrotado por un rival que se encontraba en el momento de mayor popularidad, a las puertas de los JJ OO.
En el Consejo Nacional de CDC del domingo Pujol comentó que la elección del candidato no es prioritaria, garantizó que no hay ninguna decisión tomada y advirtió que no piensa volver sobre ello hasta pasadas las elecciones europeas del 12 de junio.
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