_
_
_
_
_

Los medios de comunicación serán vendidos

Emilio Botín, conocedor de las tensiones que ha creado el futuro de los medios de comunicación que controla Banesto entre los partidos políticos y en el seno del Gobierno, salió ayer al paso sobre este punto. En el comunicado difundido anoche fue directamente al grano: "El Santander no considera conveniente, ni para las entidades financieras ni para el equilibrio de funciones dentro de la sociedad española, la presencia de los bancos como accionistas importantes en medios de comunicación".La entidad cántabra ha puesto en manos de Bankers Trust la administración de los intereses de sus participaciones y asegura que "ni Banesto ni, por supuesto, el Santander tomarán decisión alguna que interfiera en la gestión de dichos medios y se pronunciarán únicamente sobre las condiciones financieras de la venta de las correspondientes participaciones".

Más información
El Santander anuncia una ampliación de capital de 89.000 millones de pesetas

La principal razón de las citadas tensiones políticas, que han sido plato diario desde que Banesto se puso en venta, radica en la importante participación de Banesto en algunos medios de comunicación (Antena 3 TV, El Mundo y Grupo Zeta). El nuevo dueño de Banesto tiene ahora en sus manos mucha influencia.

El consejo ejecutivo del Santander, reunido durante toda la mañana de ayer, discutió pormenorizadamente sobre el futuro de estas participaciones. No en vano, hasta ayer mismo, las presiones políticas inundaron las sedes de los bancos que optaban a adquirir Banesto.

Zapatero, a tus zapatos

Las tensiones, además, trascendieron más allá de los propios sanedrines bancarios. Tras mucho tiempo en un segundo plano, desplazada por los diferentes casos de corrupción política, la crisis de Banesto volvió a ser actualidad de primer orden. Y volvió a estar latente la presión sobre los medios de comunicación.

Botín, que pertenece a una familia de banqueros y que sigue la máxima zapatero, a tus zapatos, ha salido al paso de posibles suspicacias antes de que le dijeran nada. Una actitud que puede contentar a todos. Ya el grupo IU-IC, a través de su diputado Ramón Espasa, había propuesto que se prorrateasen las propiedades de los medios entre los bancos partícipes y que se comprometieran a desprenderse de ellas en cuatro años.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_