Los fabricantes de coches inician una guerra de descuentos
La decisión del Gobierno de reducir en 100.000 pesetas e impuesto de matriculación a quienes compren un coche nuevo y achatarren el viejo ha abierto una nueva guerra de descuentos entre los fabricantes españoles. Las rebajas de algunos de ellos pueden suponer pagar hasta 300.000 pesetas menos por un coche nuevo. Seat y General Motors se unieron ayer a esta guerra, iniciada la pasada semana por Citroën y Ford.Al mismo tiempo, el ministro de Industria, Juan Manuel Eguiagaray, anunció ayer que el Gobierno está estudiando aplicar nuevas medidas de apoyo fiscal a la venta de camiones y furgonetas. Este sector está aún más deprimido que el de los turismos. La venta de vehículos industriales cayó el año pasado un 40%, casi el doble que la de turismos.
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