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La OTAN vuelve a atacar a los serbios que estrechan su asedio a Gorazde

Los bombardeos de aviones de la OTAN sobre las posiciones serbias desde las que se bate el enclave musulmán de Gorazde no parecen hacer mella en los sitiadores. Dos cazas norteamericanos volvieron a atacar ayer, por segundo día consecutivo, a las fuerzas serbias sin conseguir que levantaran su asedio. Rusia ha protestado airadamente por no haber sido consultada sobre estas acciones, que ha calificado de desestabilizadoras, y ha llegado a responsabilizar a los musulmanes de lo que está ocurriendo.El ataque aliado destruyó sólo tres carros de combate, pero plantea el interrogante de si tales acciones, aparentemente ineficaces, son sólo el preludio de una intervención más decidida de la OTAN y de la ONU, a la que los serbios acusan de ha ber tomado partido por los musulmanes. Página 3

Editorial en la página 14

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